Urdinarrain: Delincuentes faenaron 6 animales y se robaron más de 1.000 kilogramos de carne

En la madrugada del pasado sábado 25 de abril en Urdinarrain, personas desconocidas ingresaron al campo de la familia Mohr y tras haber carneado 6 animales se robaron más de 1000 kgs. de carne.

Cabe señalar que la faena que realizaron, no es un caso de abigeato más, ya que fue cargada de saña y criminalidad, debido a que mataron 2 terneros grandes y 4 vacas preñadas, a las que solo le faltaban unos 15 días para parir.

Los delincuentes a los vacunos Aberdeen Angus les dispararon con armas de fuego en la cabeza y luego los faenaron, dejando abandonado las patas, cabezas (de las 4 vacas) y las bolsas con los terneritos por nacer.

En diálogo con El Observador, el segundo jefe de la Comisaría local, oficial Claudio Romero, dijo: “Recepcionamos la denuncia del propietario el sábado en horas de la mañana y actuamos de manera inmediata, no pasaron por el ingreso al Área Industrial y quedaron marcas de una camioneta y un trailer o acopladito” y agregó que “llama la atención que habiendo otros animales, hayan matado las vacas que estaban cerca de parir y según el dueño entre los seis animales sumaban 1.400 kilos de carne, lo que se llevaron”.

 

Investigación y actuación de los brigadistas

En lo que parece estar directamente relacionado con este hecho y en un comunicado de prensa de la Policía de Entre Ríos, a través de la Dirección Prevención de Delitos Rurales, se dio cuenta de un procedimiento efectuado por la Brigada Abigeato de Gualeguaychú, vinculado a la investigación que se originó el fin de semana, tras la denuncia de un productor de Urdinarrain, que le habían faenado 6 animales de su propiedad.

Finalizadas las tareas de inteligencia para esclarecer el hecho delictivo, personal policial en conjunto con los brigadistas, se constituyeron en un local comercial de Gilbert, donde no solo se estaría vendiendo carne de dudosa procedencia, sino que además existiría un importante acopio de cortes cárnicos dentro de una cámara frigorífica.

Los efectivos llegaron al lugar, luego de determinar que en horario nocturno habrían ingresado varios vacunos faenados ilegalmente con la finalidad de despostarlos inmediatamente para la venta y distribución, ya que desde allí (según el informe oficial) se provee de carne clandestina a otros negocios de Basavilbaso.

En el local estaban estacionadas dos camionetas, una Toyota Hilux y una Ford F100, siendo la primera muy similar a la utilizada en el hecho delictivo investigado (Urdinarrain), agregando como dato ilustrativo importante que el paragolpes trasero tenía supuestas manchas de sangre, mismos rastros hallados en la caja trasera de la segunda Pick Up.

Al inspeccionar la carnicería en cuestión, se constató la existencia de distintos cortes cárnicos vacunos en la exhibidora y heladera comercial, además de verificar la presencia “excesiva” de grasa lo que llamó la atención. Además se comprobó que la carne no estaba amparada por la documentación respectiva que avalara su procedencia, por lo que los funcionarios decomisaron 33.400 kgs. de carne vacuna, 7 kgs. de porcina y 31 kgs. de grasa. También se halló a 10 metros del negocio otra cámara de refrigeración que tenía en su interior 5 cuartos, 3 costillares y una diversidad de cortes vacunos de animales de buen porte, como así también de terneros (coincidentes con los cuatrereados días atrás en esta ciudad), que no eran provenientes de una faena reglamentaria, ya que el propietario no contaba con la factura que avalare el origen de dichos productos. Además se verificó que una de las cabezas encontradas tendría un impacto de proyectil y vestigios de tierra y pasto, con un mal desangrado, que son típicos de una faena a campo, por lo que consecuentemente se decomisaron más de 300 kgs. de carne bovina, que conforme a la investigación una pequeña parte sería peritada como elemento de prueba para la causa penal, mientras que el resto se debió desnaturalizar mediante el incinerado, por no estar apta para el consumo humano.