Triste realidad en Concordia: “Los pobres comen de la basura y venden a sus hijos”

Sebastián Arístides, secretario de Desarrollo Humano del municipio de Concordia, reveló alarmantes datos sobre la pobreza en esa ciudad, indicando que la misma lleva a familias a vivir de residuos y a padres a entregar a sus hijas por dinero.

El funcionario declaró en “Zona de Opinión” de Radio Zona Concordia que a través del programa “Relevar”, que ha censado al 70% de los barrios populares, se ha logrado obtener un diagnóstico que expone la cruda realidad de muchas familias.

Arístides relató el caso de ocho familias del barrio Llamarada, quienes vivían en condiciones de extrema pobreza. Estas familias subsistían comiendo basura, habitaban en espacios insalubres y carecían de los servicios básicos. “Este es el primer caso que abordamos de manera integral”, explicó, detallando que en algunos hogares solo se comía una vez al día y que vivían hasta cinco personas en una sola habitación, sin baño y acceso a agua potable o atención médica.

La pobreza en Concordia no solo es material, sino también una profunda pobreza de valores humanos. “Lo preocupante es que la falta de recursos económicos ha llevado a la pérdida de los valores humanos”, expresó el funcionario, quien subrayó la necesidad de reconstruir esta escala de valores como una prioridad para el municipio.

El programa “Relevar” ha censado a más de 13.900 personas en Concordia, un número mucho mayor al que registra el INDEC. Este censo ha permitido identificar que 300 personas necesitan atención urgente, clasificando los barrios en diferentes niveles de riesgo. “No queremos dar algo pasajero o asistencialismo, sino transformar las vidas de estas personas desde un abordaje integral”, comentó el secretario.

Una de las situaciones más desgarradoras mencionadas por Arístides es la entrega de hijas a redes de trata como una extrema consecuencia de la pobreza. Además, la presencia de puntos de venta de drogas en todos los barrios agrava la situación, causando un daño inmenso en estas comunidades vulnerables. “La droga atraviesa a todos los barrios más vulnerables, con mucha gente que consume, agravando la situación”, dijo Arístides.

A pesar del sombrío panorama, el programa “Relevar” ha comenzado a generar cambios en algunos sectores. Los vecinos, sintiendo la presencia del Estado, han empezado a limpiar microbasurales, demostrando una respuesta positiva a la iniciativa.

Sebastián Arístides también destacó la importancia de reflotar las comisiones vecinales como una herramienta para mejorar la situación en los barrios. “Un barrio organizado con una comisión vecinal es de gran ayuda para el municipio. Es la democracia pura en el barrio”, concluyó.

La situación en Concordia es crítica, pero el diagnóstico detallado y el trabajo conjunto entre el municipio y la comunidad brindan una esperanza de cambio para estas familias que viven en condiciones tan precarias. (Gentileza del sitio 7Páginas)

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