Sin fútbol: “Cuando los dirigentes deciden, a los técnicos no nos preguntan”

Desembarcó como coordinador del fútbol formativo en el 2020 y desde entonces debió lidiar con la pandemia. No es sencillo encaminar un proyecto de formación tendiente a nutrir la Primera de Atlético María Grande, más con este panorama. Rubén Rueda coordina las categorías de Sub 7 a Sub 15, las que compiten en la Liga de Fútbol de Paraná Campaña.

En contacto con El Observador narró cómo debieron improvisar ante la situación sanitaria y también reclamó que los entrenadores sean escuchados al momento de tomar una decisión desde el seno dirigencial.

– ¿Cómo se dio tu arribo a Atlético María Grande?

– La llegada mía viene tras los 4 años exitosos que tuve en la Escuela de Fútbol Naranjitos de Paraná. Además ya había estado anteriormente en Juventud Sarmiento de Hasenkamp dirigiendo la Primera, pero ya venía manejando esta iniciativa y me volqué más a la parte de los chicos. Nos contactamos, fueron dos meses de charlas y llegamos a principios de 2020.

– ¿De qué se organizaron para trabajar en ese contexto tan complicado?

– Tuvimos dos meses de trabajo y a un mes del inicio de la Liga se paró todo por la pandemia. Fueron seis meses sin trabajar y fue realmente complicado porque cuando proyectás a largo plazo, este problema te perjudica toda esa planificación. Volvimos en septiembre y mientras tanto estábamos haciendo trabajos vía Zoom, nos fuimos capacitando en la agrupación de entrenadores de Ricardo Caruso Lombardi la cual integro. Seguidamente presentamos el protocolo y ni bien lo aceptaron se habilitaron las prácticas. De septiembre a diciembre fue el lapso que estuvimos trabajando con burbujas de 10 personas y nunca tuvimos un contagio. En este 2021 comenzamos con la pretemporada en febrero y hasta el día de la fecha no habíamos tenido ningún caso de Covid.

– Lo que manifestás es que el deporte no es un lugar de contagio directo.

– Es complicado que nos entiendan a los entrenadores o profesores porque no tenemos apoyo de los gremios para hacer oír nuestra postura. Es una situación compleja porque junto al club la peleamos día a día, mano a mano, pero para otros es fácil parar la actividad. No piensan, no tienen empatía con el otro. Hemos estado con médicos y en un partido de fútbol no existe un alto riesgo de contagio incluso hay estudios que indican eso. Cuando los dirigentes deciden, a nosotros no nos preguntan, toman decisiones y no hay una sola consulta hacia los entrenadores. En Paraná se jugó un torneo y en Paraná Campaña no, si allá se hizo por qué acá no. Aquí se demoró demasiado, hubo tiempo desperdiciado, tardaron un montón y no se jugó. En su momento había mucho menos casos y no se decidieron a comenzar el torneo. No nos piden opinión, estamos trabajando y ningún chico se contagió por estar en el club. Siempre que hubo casos fueron por contactos con familiares o amigos. Trabajando con las burbujas dio buenos resultados, pero jamás se nos pidió una opinión y creo que estamos en el lugar preciso para aportar algo.

– ¿Cómo era el trabajo antes de las últimas restricciones?

– Cuatro días por semana por burbujas. Las categorías competitivas trabajaban los cuatro días y las más chicas, Sub 9 y Sub 7, lo hacía tres y dos días. Ahora esperemos volver, pero veo muy lejano el inicio del torneo porque primero queremos que el chico vuelva a la actividad. Es una necesidad hacer actividad física, cuando retomamos por primera vez, nos encontramos con chicos que tenían miedo y otros con sobrepeso. Trabajamos para recuperar a ese chico conscientes que el deporte es muy importante para nuestra salud. Ojalá se pueda volver rápido pero lo veo difícil porque los que toman las decisiones lo hacen más desde la política que por otra cosa.

– ¿Cuál es la idea del proyecto en Atlético?

– Se enmarcó primero en apuntar a los juveniles. En llegar y fortalecerlos individual o técnicamente y a futuro, que esto sea un proyecto a largo plazo, a tres años. Que los chicos puedan llegar a Primera y que el club pueda contar con futbolistas juveniles de su propia cantera.

– ¿Existe posibilidad de establecer algún convenio con clubes de Primera División?

– En un tiempo tuve una escuelita de fútbol y quedó una buena relación con Unión de Santa Fe, hace poco tuvimos contacto con Atlético Tucumán, con captaciones donde ellos ven a jugadores del interior. También se hizo algo con River Plate pero se cortó por la pandemia, se hizo complicado observar jugadores continuamente por la provincia. Tampoco buscamos ilusionar al chico. Iremos avanzando a medida que nos permitan hacerlo.

– ¿Qué se busca obtener primero? ¿El jugador o el resultado?

– Lo que pedimos es tiempo de trabajo. Para tener resultados primero tenés que contar con una formación correcta del chico. Los resultados no se dan de un día para el otro, nosotros apostamos siempre en paralelo, a medida que uno va formando vamos obteniendo los resultados. Primero tenés que formarlos, enseñarles cómo se le pega a la pelota, cómo ubicarlos dentro de la cancha y demás. Después seguimos avanzando porque la formación es algo diario y en el fin de semana se da una conexión para plasmar lo trabajado. Lo que hacés día a día, va saliendo de a poco, pero llega un momento que queda todo encadenado. Para tener competencia primero tenés que formar, los resultados no aparecen hoy, van apareciendo en uno o dos años cuando el mecanismo se empieza a aceitar. Nos consideramos formadores.