Seguí: Sugerencias del Área de Bromatología por Semana Santa

pescadoDurante Semana Santa, muchas personas incorporan o incrementan en su dieta, el consumo de carne de pescado. El carácter saludable del pescado no sólo es debido a su composición nutricional, sino que su calidad depende, en gran medida, de que mantenga su condición de inocuidad, es decir de alimento sano. Por ello, el Área de Bromatología de la Municipalidad, sugiere tener algunos cuidados al momento de comprar y manipular el pescado fresco, congelado o enlatado.

De esta forma, puede suceder que se compre pescado fresco pero no apto para el consumo. Una de las maneras mediante las cuales se puede prevenir la ingesta de pescado en mal estado y, con ello, la ocurrencia de Enfermedades de Transmisión Alimentaria (ETA), es aprender a reconocer la inocuidad del alimento, atendiendo a ciertos caracteres de su aspecto.

Pescado enlatado

Verifique que la lata no presente indicios de oxidación, abolladura o agujeros, que no pierda líquidos o que no esté manchada con parte de su contenido.

Una vez abierto el producto, si no se utiliza en su totalidad, retirarlo de la lata y colocarlo en otro recipiente.

Verificar fecha de vencimiento.

Pescado Congelado

Mantener la temperatura de congelación, desde el momento en que se adquiere hasta que es nuevamente refrigerado, una vez en el hogar guardar el pescado en el freezer o congelar de manera inmediata.

Descongelar trasladándolo del freezer a la heladera, colocándolo a baño maría, con agua fría al momento de ser utilizado. “Nunca descongelar los alimentos a temperatura ambiente”.

Pescado Fresco

El cuerpo será rígido, firme y brillante.

Los ojos transparentes, brillantes y salientes “No vidriosos ni hundidos.”

Las escamas deben tener brillo metálico, estar bien adheridas a la piel, presentando resistencia al intentar quitarlas.

Las branquias deben ser de color rojo.

La carne debe ser  tensa y húmeda y mantenerse firme al presionarla con el dedo.

El olor debe ser agradable, “no oler a amoníaco.”

Encontrarse refrigerado en todo momento.