San Benito: Legado familiar para el cuidado de caballos de carrera

Varias generaciones de la familia Franco se encuentran ligadas a la crianza y cuidado de caballos de carrera, mientras que fue Don Andrés, junto a su esposa Favia Bernal, que se afincó en la zona de San Benito (Departamento Paraná) y junto a su hijo Anastasio continuó con la actividad, que se iba desarrollando en distintas pistas.

Al respecto, Fabián Franco, actualmente a cargo del Stud “Los Nietos”, ubicada en la mencionada ciudad, en una charla con El Observador contó que “mi padre (Anastasio), prácticamente se crió con los caballos y hoy seguimos el legado, tanto de él como de mi abuelo. Antiguamente se los vareaba en la calle Guido Marizza que era de tierra, luego se armó una pista en las inmediaciones del cementerio que posteriormente se cerró y hoy cuento con este lugar donde tenemos los establos, donde los animales están alimentados y bien protegidos”.

– ¿Cómo afectó la pandemia a la actividad?

– Lamentablemente perdí a mi padre y a mi madre (Luisa Silveria Pérez), así que fue una situación triste y dolorosa, pero que tuve que afrontar y seguir trabajando. El rubro del turf está totalmente parado, no hay competencias, las pistas están cerradas y es una complicación ya que de la actividad dependen diferentes sectores y hay mucha gente que se dedica y vive de esto. Entre ellos, veterinarios, herreros, las personas que se dedican a la limpieza de las camas para que cada box quede en condiciones, también están los vareadores, los que se dedican a transportar a los caballos…el turf quedó muy excluido y no se entiende, porque las carreras son al aire libre y pienso que con un buen protocolo y cumpliendo las normas sanitarias se podrían realizar. Hoy es un sacrificio para nosotros hacer este trabajo, porque vivimos de esto y estamos sin actividad, viendo cómo otras propuestas ya fueron habilitadas. Pero soy optimista y considero que las pistas de turf se reabrirán que es para el bien de mucha gente que está involucrada directa o indirectamente y de empleados que se ocupan de diferentes tareas en cada carrera. No la estamos pasando bien por el tema de la pandemia y esperamos prontamente retornar, no sólo por la parte económica, sino porque la gente también necesita distraerse. Además, las carreras se organizan siempre en beneficio de una institución y cuentan con la habilitación correspondiente.

– Hay distintos grupos de proteccionistas que trabajan en beneficio de los animales

– Me parece bien que haya más gente que proteja a los caballos. En nuestro caso los atendemos muy bien, nunca podríamos tenerlos en mal estado y ante algún accidente se los cura de inmediato. Contamos con el veterinario que ante cualquier situación viene y los atiende, en caso de lesiones les da la medicación respectiva, así que están muy protegidos. Nosotros vivimos de esto, por eso el cuidado es muy especial, en cuanto a la alimentación, limpieza, atención profesional. Hoy en día mantener un caballo de carrera cuesta entre 20 a 25 mil pesos mensuales, mientras que ese monto se reduce cuando están en descanso. Conozco a varios proteccionistas y valoro mucho la tarea que vienen realizando, principalmente cuando se ocupan de aquellos que están en muy malas condiciones. Para nosotros es muy importante el cuidado de los caballos que lo realizamos los 365 días del año y más aún cuando se preparan para las carreras, que es un trabajo intenso. Hay una pasión en esta actividad, que requiere de mucho compromiso y de una tranquilidad para tratar de la mejor manera a los animales. Tarea que a veces no te da descanso y donde hay temporadas buenas y otras no tanto, pero es muy valioso hacer lo que a uno le gusta y continuar la actividad que también realizaron con esfuerzo, mi abuelo y mi padre.