¿Quién se acuerda del Club Deportivo Aceitero Crespo?

Escribe ORLANDO BRITOS especialmente para El Observador

El pasado 31 de marzo, se cumplieron 61 años del nacimiento de una institución deportiva crespense que hoy ya no existe y que muchos jóvenes no llegaron a conocer, pero que significó en sus tiempos un espacio especial para varias generaciones. Sin dudas, para los que peinan canas, esta será una pincelada de recuerdos de nuestra historia chica.

El 31 de marzo de 1951 nació el Club Deportivo Aceitero Crespo, nutrido por obreros y empleados del establecimiento industrial de la empresa Sagemüller Hnos. y estando integrada su primer comisión directiva por los siguientes miembros: presidente: Pedro Beres; vicepresidente: Félix Alonso; secretario: Félix Goette;pro-secretario: Werner Girbich; tesorera: María C. Gant; pro-tesorero; Teodoro Huck; vocales: José Pittavino, Marcelo Amundarray, Alfredo Huck y Juvencio Rojas; Revisores de Cuentas: Enrique Senger y Agustín Berns e instructores: Pedro Beres, Eduardo Schefer y Francisco G. Sagemüller.

Las actividades del Club Deportivo Aceitero Crespo eran desplegadas en un campo de deporte que la empresa Sagemüller había afectado a tal fin, lindero a la fábrica de aceite de lino y oleaginosas, hoy transformada en envasadora de productos como arroz y yerba. Entre las disciplinas que allí se practicaban se destacaban el lanzamiento de bala, disco, saltos en alto y largo, carreras de 100 metros llanos, postas de 4 x 100 metros, bochas, tiro al blanco y también se jugaba al faust-ball, un deporte de pelota de puño. Sus equipos de gimnastas y acrobacia representaron a Crespo en torneos de distintas ciudades del litoral por medio de esta institución, que tuvo su esplendor en la década del ‘50. Cabe destacar que el funcionamiento de esta entidad deportiva sólo pudo ser posible por el apoyo económico en infraestructura y vehículos, cedidos por la firma Sagemüller Hnos., fundamentalmente por voluntad de Don “Pancho” Sagemüller.

Para quienes hicieron sus primeras incursiones en el deporte mediante las clases que se dictaban en este club, resulta difícil de olvidar a Guillermo Osvaldo Pentke, quien fue profesor de gimnasia y volcó en esa institución, al igual que en otras como Sarmiento o Cultural, todo su conocimiento y experiencia adquirida en el Club de Gimnasia Crespo y en el Instituto Alemán.