Paraná Campaña: ¿Por qué cierran los tambos?

La sequía, la situación productiva de la región, la realidad del ganadero y del tambero, fueron algunos de los temas abordados en la charla que la ingeniera agrónoma María José Marnetto mantuvo con El Observador.

Quien está al frente de la Oficina Técnica del INTA en María Grade, resaltó la lluvia registrada hace unas semanas. “En la Sociedad Rural se midieron 71 mm, después en otros lugares midieron 60 mm o un poco menos. Fue una lluvia muy oportuna y necesaria, con un promedio no menor a 50 mm en toda la zona. Veníamos con lluvias inferiores a las normales y con un tiempo importante donde las precipitaciones habían sido escasas. Si bien no era algo muy grave como en otros momentos, en este último mes se había sentido la falta de agua”, señaló.

– ¿Habían cultivos comprometidos?

– Desde mi lugar trabajo con productores ganaderos y en ese aspecto puedo decir que se resintió en cuanto a recursos forrajeros. Ante la faltante de pasturas se debió hacer uso de las reservas y existe la problemática de quedarse sin pasto. En ese contexto algunos deben comprar y es un recurso muy caro. En cuanto a la agricultura algunos trigos tempranos pudieron verse afectados. Hubo problemas con las fertilizaciones que no van a ser tan efectivas porque hay gente que fertilizó, sobre todo con nitrógeno, y hubo una lluvia en el momento como para que ese fertilizante se incorpore. Pero esto no quiere decir que se vaya a afectar de manera pronunciada el rendimiento de la producción.

– ¿De qué manera afectó al ganadero?

– La lluvia en este momento es muy propicia porque los productores ganaderos están sembrando maíz para hacer silos y volver a recuperar las reservas forrajeras. Y también fue importante porque recargó el perfil del suelo. A ellos les informamos que los pronósticos apuntan a tener precipitaciones un poco inferior a lo normal, de modo que recomendamos cómo manejar los recursos forrajeros en función de la disponibilidad de los mismos. En estos años más complicados desde el punto de vista climático, hay que hacer una selección, vender algunos animales y dejar aquellos que están más productivos. A la mayoría de los productores ganaderos como a los demás les cuesta mucho ajustar la carga animal a la oferta de forrajes con que cuentan en el campo y eso hay que trabajar en periodos como este.

Las lluvias de hace unas semanas, trajeron cierto alivio a la región.

– ¿Cómo está la situación del sector lácteo?

– Los tamberos están en la lucha con el precio de la leche, que es muy cercano a los costos de producción. En los últimos años se han visto cierres de tambo en la zona y se debe a la dificultad para crecer en escala. Para mantenerse en el sistema se necesita crecer en escala, si el precio está bajo se deben producir más litros para sostener los gastos fijos. También se debe a que en muchas ocasiones los tambos son emprendimientos familiares y existen problemas generacionales. Es decir que llega el momento en que los chicos crecen, se van a estudiar a la ciudad y no siguen con la actividad. Son tambos que trabajan en superficies chicas y resulta complejo ver qué actividad se puede hacer en esos predios si dejás esa actividad.

– ¿Qué alternativas tienen después de dejar el tambo?

– Es muy complicado porque hay tambos de superficies de 50 has y es difícil plantear otra actividad. Muchos terminan dándolo en arrendamientos a otros y abandonando porque generalmente son personas grandes donde los hijos hicieron su vida y tomaron otros rumbos y con el arrendamiento pueden tener un ingreso.

– Allí entran en juego productores que tienen capacidad de crecimiento para arrendar o adquirir campos.

– Cada censo agropecuario que se hace tenemos menos establecimientos. Disminuye el número de explotaciones agropecuarias (EAPs). O sea que hay concentración de la tierra y se debe a que los pequeños y medianos productores tienden a salir del sistema y eso es tomado por otro productor. No es que la tierra queda sin producir, sino que otros que están en la etapa de crecimiento pueden tenerla para seguir trabajándola.

– ¿Desde el INTA están ofreciendo cursos y capacitaciones?

– El lunes 14 comenzamos un curso virtual para formación de auxiliares en ganadería y productores. Un desafío que llevamos adelante varios técnicos de la experimental de Paraná coordinado por la Agencia de Extensión Rural de La Paz y la Oficina Técnica de María Grande. Está pensado para operarios y productores que llevan adelante las tareas diarias cuyo establecimiento ganadero son de cría apuntados al centro norte de la provincia. Será con módulos teóricos que el productor va a recibir por WhatsApp y cada módulo tendrá una actividad práctica para ver si pudo comprender lo que explicamos en ese video, trabajando con datos propios de cada establecimiento. Después están planificados encuentros semanales para despejar dudas y generar algún debate sobre la temática.

– ¿Los productores se vuelcan a estas capacitaciones?

– Ahora tenemos que ver esta metodología completamente nueva para todos, pero antes contábamos con un grupo de gente ávida de capacitarse, de conocer nuevas tecnologías, de procesos y manejo productivos.

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