Padre José: “Tenemos que pedir que aumenten las vocaciones sacerdotales y que en las familias se viva la fe”

La Parroquia “San José” de Galarza cuenta desde hace algunos días con un nuevo sacerdote: el Padre José María Castro. Esta semana dialogó con El Observador y contó sobre su regreso a Galarza, donde ya desempeñara la función pastoral durante más de 6 años. “Encontré una parroquia muy ordenada y con todos los cambios que a nivel ciudad e Iglesia se han ido produciendo en este tiempo, pero el cariño y el afecto de la gente sigue siendo el mismo. Sin dudas que uno ha sido parte de esta historia y estoy contento de volver a estar en Galarza” señaló el sacerdote, quien manifestó que “voy a continuar la tarea del Padre Rojas (su antecesor), poniendo principal hincapié en la catequesis y lógicamente en las líneas pastorales que ha trazado el obispo para nuestra Diócesis”.

El sacerdote comentó que “hace unos días que estoy al frente de la Parroquia, por lo que estoy viendo qué cosas más se pueden hacer. El objetivo es que la comunidad sienta propia a la parroquia, que la gente puede celebrar su fe y encontrarse en ella. En cuanto a lo edilicio, se necesita revocar las paredes del salón parroquial, que es una necesidad y a largo plazo, el sueño es poder concretar la casa parroquial y todo lo otro que vaya surgiendo”.

Para finalizar y a modo de reflexión, el padre pidió que “aumenten las vocaciones sacerdotales y que en las familias se viva la fe. Hoy, a las vocaciones no se las acompaña, ni se las alienta en las propias familias”. Dijo que “toda vocación se descubre en la familia; al hijo del médico le gustará seguramente seguir una carrera relacionadaa la salud, el del carpintero a modelar la madera y a transformarla en un mueble y desde la fe, a veces cuesta que los niños vean a sus padres rezar, participar de la Santa Misa y vivir la fe, que no tiene que ir aparte de nuestra vida, porque es parte y le da sentido a nuestra existencia”. Bregó por “el diálogo y la unidad en las familias y a alentar nuevas vocaciones con la misión que tenemos todos los bautizados, que es construir el Reino de Dios desde el lugar que podamos responder”.