Orduna: “En Entre Ríos hay una Ley de Cannabis medicinal de avanzada en comparación a la nación”

En la noche del jueves el Dr. Javier Orduna disertó en el auditorio Eva Perón sobre las leyes nacionales y provinciales que regulan el uso del cannabis medicinal. “El primer enemigo de los productos con cannabis es que no están testeados y cuando se hicieron los análisis el 95 por ciento eran truchos”.

Citado por la “Cooperativa Despertar” de nuestra ciudad Orduna brindó precisiones para el público que estuvo presente durante un poco más de una hora que duró la presentación. Asistieron profesionales, público en general, cultivadores solidarios y fuerzas de seguridad de Crespo y Diamante.

“Celebro que estén acá las fuerzas de seguridad para saber como proceder con las personas que poseen el aceite o transportan plantas de Cannabis para fines medicinales”.

Durante la presentación Orduna destacó que “En Entre Ríos hay una Ley de Cannabis medicinal de avanzada en comparación a la nación” pero que a su vez el principal problema es que “cuando uno va al Estado a pedir aceite de Cannabis medicinal, éste no la tiene y las obras sociales niegan la cobertura del aceite porque es importado”.

Tenencia

Por este motivo se termina requiriendo del autocultivo o la figura de cultivadores solidario que son quienes siembran para pacientes que lo necesitan por algún tipo de dolencia, fibromialgia, epilepsia refractaria dentro de otras tipos de afecciones que el aceite cannabis ha resultado beneficioso.

En cuanto a los usuarios o cultivadores solidarios se detalló que “no hay limites en la cantidad de plantas y se pueden tener en más de un domicilio y hasta en tres” precisó Orduna.

Las personas que quieren cultivar tienen que registrarse en eI Instituto Nacional de Semillas (INASE).

El cannabis hasta el 2018 era visto como la cocaína y la heroína a los ojos de la Ley por ende se prohibía. Se entendía que era dañino para la salud. Luego la ONU lo traspasa a la lista 1 que integran las sustancias laxas sin sanción penal; deben ser fiscalizadas. A partir de ese momento, se permite cultivar plantas para producir el aceite de cannabis.