Opiniones de Pedro Bisogni (Bomberos ER): “Los gastos en cada cuartel se han multiplicado por 3”

El 2 de junio de cada año se conmemora en todo el país, el “Día del Bombero Voluntario”. Esta fecha se tomó como referencia porque en esa fecha, pero de 1884, se conformó el primer cuerpo bomberil de la República Argentina, en La Boca (Buenos Aires). En la actualidad existen unas 1.200 asociaciones, conformada por más de 60.000 dirigentes e integrantes del cuerpo activo, con vocación de servicio y cuya misión es la de salvar vidas y proteger los bienes de la comunidad.

El presidente de la Federación Entrerriana de Asociaciones de Bomberos Voluntarios, Pedro Bisogni, en declaraciones a los medios del “Centro Periodístico de Entre Ríos”, habló del presente de esta actividad y de la difícil situación que muchos cuarteles atraviesan: “Los gastos se han incrementado por 2 ó 3 en relación al año pasado y en algunos casos, se aumentó la demanda. Por ejemplo, en estos meses, por la creciente del río Uruguay, los bomberos voluntarios de Concordia, Colón, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú han tenido muchísima más actividad y por supuesto los costos se incrementaron. El combustible pasó a ser el mayor insumo en cuanto a costos de funcionamiento. Lo que pedimos siempre es que se agilicen los trámites de los aportes del gobierno. Todos los cuarteles funcionan los 365 días del año las 24 horas, ayudando a la gente, atendiendo los incendios, accidentes… y eso se logra con trabajo, esfuerzo y por supuesto con recursos. Ya no alcanza solamente con las ventas de tortas fritas, pastelitos, pollo, ‘chancho móvil’, algunos hacen bingo, bailes, que igualmente son fuentes de ingresos que les permiten cubrir algunos gastos que tienen para prestar el servicio. Para que tengan una idea, en septiembre, 3 equipos autónomos costaban $ 4 millones y hoy el valor es de $ 12 millones, se multiplicó por 3. Para vestir un bombero con su traje, casco, cubre-cuello y demás, se necesitan más de 2.500 dólares y si sumamos el equipo autónomo, son $ 7 millones en total por cada bombero. Y son elementos que no se pueden obviar, la única forma de poder hacer el trabajo de manera eficiente y no fallar en el intento, es estar protegido. Y esos equipos además, tienen su vida útil. Para un casco son 10 años; los trajes estructurales, 5 o 6 años, después son como un disfraz. Por eso es muy importante que los gobiernos acompañen a los bomberos…

– ¿Sienten que falta más apoyo para los bomberos…?

– Si uno quiere ver la realidad y solidaridad de cada localidad, tiene que ver el cuartel de bomberos y uno se da cuenta el apoyo que brinda su comunidad. Villa Elisa por ejemplo, es una ciudad de 16.000 habitantes y tiene más de 700 socios, cantidad que seguramente no lo tienen las grandes localidades. Pero en la gran mayoría de las ciudades, la gente tiene conciencia que los bomberos necesitan recursos para estar preparados y equipados…