Muere en pleno vuelo tras ingerir 246 bolsitas de cocaína

Udo “N”, un ciudadano japonés de 42 años, tenía que traficar 246 envoltorios de cocaína dentro de su cuerpo. Se tragó, en Bogotá, las bolsitas una por una por una. Se subió a  un avión en Colombia. Hizo escala en México y partió hacia su destino final, Narita, en Japón. Pero murió en pleno vuelo.

Udo “N”, como lo identificó la fiscalía del estado mexicano de Sonora, había abordado un vuelo. Pero en pleno vuelo, Udo “N” empezó a sentirse mal. Y su cuerpo empezó a sacudirse. Las azafatas lo vieron y pidieron permiso para aterrizar de emergencia.

El avión de Aeroméxico que llevaba a Udo “N” a Japón tuvo que realizar el aterrizaje durante la madrugada del viernes en el aeropuerto de Hermosillo, capital del estado de Sonora, en el noroeste del país.

“Personal se percató que una persona sufría convulsiones, por lo que solicitaron aterrizar de emergencia en esta ciudad, Hermosillo, Sonora, y al hacerlo a las 02:25 horas fueron abordados por paramédicos quienes decretaron sin vida a Udo ‘N'”, firmó la fiscalía.

El cadáver fue retirado del avión para efectuar estudios forenses que revelaron que el individuo llevaba consigo 246 envoltorios plásticos de 2,5 centímetros de longitud por uno de ancho, localizados en los intestinos y el estómago.

La autopsia determinó que la causa de la muerte fue un edema cerebral por crisis hipertensiva, derivada de sobredosis de narcótico, y que el ciudadano japonés no presentaba otros signos de violencia que pudieran haber ocasionado su muerte.

El avión, que llevaba consigo a otros 198 pasajeros, continuó el viaje a Japón una vez concluidos los protocolos internacionales.

El tráfico de narcóticos en el organismo de “mulas” humanas es una práctica frecuente de los carteles de las drogas (Fuente: AFP y The Guardian).