Maidana: “Me siento orgullosa de poder desempeñarme en esta profesión”

Integraba un programa deportivo y para profundizar en conceptos, quiso conocer el reglamento por lo que se volcó a efectuar el curso de árbitro; cuando menos lo pensó ya estaba dentro de la profesión que sigue con pasión. Ruth Maidana nació en Tucumán, se crió en una familia bien futbolera vinculada sentimentalmente a Atlético, donde incluso sus hermanos lucieron la camiseta en torneos de Liga y de ascenso. Hace unos años llegó a Libertador San Martín y continúa navegando en el mundo arbitral detrás de sus sueños. En charla con El Observador recorrió aspectos relacionados con su vida y la profesión.

– ¿De qué manera nació tu vínculo con el arbitraje?

– Llegó a mi vida por medio de la radio donde trabajaba porque soy comunicadora social. Teníamos un programa deportivo en el cual mis compañeros me incentivaron a hacer el curso de árbitro para poder adquirir términos futbolísticos específicos y tener un fundamento con qué poder dialogar. Inicié el curso en la Liga Tucumana y mientras lo hacía nunca me imaginaba estar en un campo de juegos porque lo mío era meramente conocimiento teórico. En la primera práctica que tuvimos en 1° año cuando agarré el silbato, desde ese momento nunca más lo dejé. Me gustan los desafíos y para mí esto lo es y lo tomé con responsabilidad. En 1° año teníamos prácticas y los profesores tuvieron un seguimiento muy cercano hacia mi persona con lo cual pude explotar esta habilidad de conducir un juego.

– ¿Qué edad tenías cuando arbitraste el primer partido?

– 20 o 21. Antes de debutar, como tenía ansiedad, unos colegas compañeros míos me llevaron a partidos extra oficiales y ahí fue donde practiqué con la bandera de asistente. Después cuando llegaba a las prácticas estaba más suelta; la sensación es maravillosa porque pasás a ser la autoridad de un partido, es decir: “este juego está a cargo tuyo, vos lo conducís”.

– ¿Cómo te trataron en los primeros años?

–  Tenemos una referente tucumana: Florencia Romano. Fue la primera mujer en el arbitraje del fútbol profesional argentino. En sí es referente nacional, ella se radicó en Buenos Aires. También contamos con Leila Algarañaz quien es contratada por AFA. Ella hizo el camino para que nosotras lo desarrollemos con más facilidad, entonces la mujer en Tucumán está bien posicionada y bien respetada dentro del arbitraje. En lo personal siento mucho respeto de los jugadores, técnicos y personas que participan en un partido por lo que uno hace. A nuestra tarea la realizamos con mucha responsabilidad, las otras personas lo ven y por eso me siento orgullosa de poder desempeñarme en esta profesión.

– ¿De qué manera se dio tu inserción en el fútbol entrerriano?

– Llegué a Libertador en el 2018 por motivos de estudio. Soy técnica en Comunicación y quiero especializarme. En cuanto al referato, desembarqué en la Liga Diamantina, una entidad que aprecio mucho y desde el minuto uno me trataron con mucho respeto, me dieron mi lugar y pude debutar en Primera División. Asimismo tuve bastante rodaje. Luego llegó la posibilidad de dirigir la Copa Entre Ríos de la Federación Entrerriana en ambas ramas. También pude ser parte de esta historia de la mujer incluyéndose en el mercado laboral futbolístico al ser la primera mujer en dirigir un partido de Primera División.

– ¿Realizás cursos en AFA?

– En este momento estoy en el 2º año del encuentro de AFA que se inició en el 2018. Por un conflicto gremial con el Consejo Federal de AFA, nuestro curso se suspendió y no pudimos seguirlo durante un año. Todavía tenemos que rendir en ciertas pruebas y ahora con la pandemia no sé si será a fin de año o el próximo. Pero estamos a un paso de recibirnos.

– ¿Cómo es tu estilo de arbitraje?

– Tuve la gracia de poder contar con una familia muy futbolera, mis hermanos jugaron al fútbol profesional en Atlético Tucumán y nací en un hogar donde siempre fui nutrida con eso. Hacer la lectura del juego y mirar partidos era una de mis especialidades. El estilo precisamente tiene que ver mucho con la lectura, con tener tacto con los jugadores, con los técnicos, porque todos participan.

– ¿Qué sueños seguís dentro de la profesión?

– Un objetivo cercano es poder recibirme en el curso que efectuamos en AFA. También tener la participación en torneos federales; el máximo sueño es ser árbitro internacional y jugar un Mundial.

– En la previa de un partido, ¿se investiga sobre los equipos?

– Siempre nos recomiendan estudiar a los equipos, investigar la zona, a la gente, a las personas… En lo particular soy una persona que investiga, para mí es muy importante. Fui jugadora de fútbol y de handball, entonces lo de estudiar al rival era sumamente relevante y acá nosotros también jugamos, tenemos nuestro equipo porque nadie dirige sola, están los asistentes y formamos un equipo. En la charla previa en el vestuario, tenemos estrategias y tratamos que se lleven a cabo durante el juego.

– ¿Qué pensás sobre la introducción de la tecnología en el arbitraje?

– Es una herramienta más para el beneficio de nuestra tarea. Si bien analizar las jugadas, mirarla, repetirla y tener ese parate, creo que es innecesario para el juego; pero la tecnología como en todas las áreas, está. Llegó al fútbol y es cuestión de adaptarnos.

– ¿Seguiste entrenando durante la cuarentena?

– Sí, lo estoy haciendo por mi cuenta. Ahora formo parte de la Liga Paranaense, de modo que cuando se reanude el fútbol, estaré arbitrando en sus torneos. Afortunadamente cuando llegué a Entre Ríos varias ligas me abrieron las puertas, la de Paraná Campaña, la Diamantina… y por una cuestión geográfica me incliné por esta última donde estuve por casi tres años y me brindaron lo mejor. Por otra parte quiero destacar el Departamento Arbitral de la Federación Entrerriana donde hay una nueva Comisión, nos están capacitando constantemente, tenemos clases de Zoom casi de tres horas y seguimos perfeccionándonos para estar preparados cuando se retome la actividad.