Un hombre de Nueva Jersey, llamado Bill Bresnan, le ha escrito a su esposa Kisten en los últimos 40 años alrededor de 10.000 cartas de amor, notas y tarjetas, al menos una de ellas por cada noche de su matrimonio.

Hoy ambos tienen 74 años y en una entrevista para la cadena de noticias ABC revelaron los secretos del éxito de su pareja. Se conocieron cuando Bill estaba dando una clase en 1974 y ella era su alumna. Apenas la vio, él se quedó obnubilado por su belleza y luego, comenzaron a viajar juntos en el tren y desde ese momento intercambiaban notas, dibujos y garabatos escritos en servilletas de papel.

Al cabo de un tiempo comenzaron a salir y Bill recuerda: “Comencé a enviarle periódicamente cartas graciosas y postales de varias de las ciudad en las que yo estaba entrenando. Algunas eran de Chicago, Los Ángeles y una servilleta de un restaurante de Boston. Todas las cartas fueron firmadas con la frase `Te amo, mi querida´ con una firma con el signo infinito”. Sin embargo, luego de su casamiento él también continuó con esta práctica.

Algunos años atrás, la pareja decidió crear un sistema de registro para organizar las miles de cartas y tarjetas cronológicamente. “Las hemos organizado de manera tal que si quisiéramos recordar dónde estábamos en ese momento o qué estábamos haciendo, extraemos el archivo y visitamos el pasado”, explicaron. Los escritos funcionan como un diario de amor que registra cada una de sus vivencias.

Bill confiesa que nunca tuvieron televisión en su pieza, que cada noche comen con velas y música romántica sonando de fondo y que cada beso de buenas noches es seguido de un te amo al día siguiente.

¿Cuál es la clave?, según este matrimonio cada uno debe ponerle empeño a la relación todos los días y nunca ir a acostarse enojado, hablar sobre todos los temas y cada cosa debe poder ser resuelta antes de dormirse. “Nunca tuvimos una pelea en 40 años de casados, podemos no estar de acuerdo pero hablamos al respecto en vez de discutir”, cuentan.

El hombre espera que su historia de amor inspire a las parejas jóvenes para trabajar más en sus relaciones y observa que hoy en día muchos comen uno al lado del otro con la vista concentrada en la pantalla de sus celulares sin hablarse, y reflexiona: “Quiero que ellos disfruten y atesoren el tiempo que se tienen entre si”.