Las borracheras ocasionales alteran los circuitos cerebrales de los adolescentes

Beber alcohol en exceso de forma puntual en los ratos de ocio afecta a las conexiones cerebrales de los adolescentes. Estas alteraciones podrían provocar dificultades en la atención y velocidad del procesamiento, problemas de memoria y conductas impulsivas en los jóvenes.

Los autores analizaron mediante magnetoencefalografías la actividad cerebral de 73 estudiantes universitarios de primer año. De ellos, 35 (17 chicos y 18 chicas) admitieron tener borracheras ocasionales y 38 (21 chicos y 17 chicas) apenas bebían. Los jóvenes no pudieron beber ningún líquido alcohólico durante las 24 horas previas a la prueba. Las diferencias registradas en cuanto a conectividad neuronal entre uno y otro grupo tuvieron lugar en estado de reposo, sin que los participantes realizaran tarea cognitiva alguna.

Aunque falta por procesar gran parte de los datos obtenidos para saber cómo afectan estas alteraciones a los jóvenes, los investigadores avanzan que a nivel conductual y cognitivo se han observado algunas dificultades en atención y velocidad de procesamiento, problemas de memoria o perfiles de conducta caracterizados por la impulsividad. También destacan la búsqueda de sensaciones o la atracción por el riesgo, aunque se desconoce si en este caso el alcohol es causa o más bien efecto de estos perfiles. (Neurología.com)