Histórica bajante del Río Paraná

El río Paraná bajó más de dos metros en la capital entrerriana, en apenas 50 días, según confirmaron a Elonce TV desde Prefectura. Precisamente, este lunes por la mañana se registraba una altura de 1,89 metros frente al puerto local, mientras que el 16 de mayo, el día anterior a iniciarse la prolongada bajante alcanzaba los 3,97 metros.

El jefe de Prefectura Naval Paraná, Cristian González, había dialogado con Elonce y había anticipado que el río Paraná iba a seguir bajando. El nivel del río bajó 2,09 metros en 50 días frente a la costa de la capital entrerriana y esto marca un récord en las últimas décadas, dado que el mínimo anterior se había registrado en 2006 con 1,98 metros.La bajante está vinculada a la falta de lluvias en las cuencas altas. El Instituto Nacional del Agua (INA) advirtió que los ríos seguirán bajando puesto que no hay perspectivas de lluvia para los próximos días.

Señalan que la bajante está vinculada a “cuestiones climáticas” que tienen que ver con la falta de lluvias en las cuencas altas. Si se mantiene esta situación, implicará que el nivel del Paraná, descienda aún más. “La influencia de las lluvias arriba es fundamental en el comportamiento del río”, observan.

Además, admiten que “no se prevé un repunte del Paraná. Va a seguir así hasta que llueva en Brasil, en la cuenca del Iguazú, que es el que más rápido genera altura en el Paraná”.

Navegabilidad

Consultado sobre las complicaciones que la histórica bajante del río acarrea, González explicó que “en los canales comerciales se está trabajando normalmente”, señaló y agregó que “sí podría haber inconvenientes a la salida de los clubes náuticos”.

Por otra parte, sostuvo que “en la parte deportiva, debemos hacer hincapié en que hay nuevos bancos de arena que antes no existían. Las medidas de seguridad son aún más necesarias cuando el río está bajo que cuando se encuentra alto”, dijo.  Hay zonas que quedaron muy playas y pueden generar impactos de parte de las lanchas, con la consiguiente expulsión y caída al agua de los pasajeros.

Pescados

Los primeros en sufrir las consecuencias de esta histórica bajante son los pescadores. Desde Bajada Grande y Puerto Sánchez coincidieron en que, “mermó un poquito” la salida de peces.
“Estaba saliendo mucha cantidad, y ahora mermó un poquito, porque puede afectar un poco la bajante del río, pero no es mucho”, comentaron puesteros de Bajada Grande.
“Hace más de 25 años que el río no está así, y eso perjudica a los pescadores porque el agua se enfría y hay que andar un poco más, sobre todo de noche, y con el frío”, señaló otro puestero de Puerto Sánchez (El Once).