Historias de vida, esfuerzo y trabajo en el “Día de la Mujer”

Por el “Día Internacional de la Mujer”, que se conmemora este viernes 8 de marzo, estuvieron en la redacción de El Observador, Mary Báez (chofer de remis) y Claudia Eichhorn (instala y repara equipos de refrigeración), quienes dejaron un mensaje por esta fecha especial y contaron cómo pudieron insertarse, desarrollarse y crecer en sus actividades, donde mayormente predominan los hombres. También dialogamos con las futbolistas Florencia Senger (Crespo) y Marianela Magallán (Galarza), con la piloto de karting, Carolina Ramel (Valle María) y con la dirigente Lorena Hillairert (Paraná).

 

Claudia Eichhorn: “Tenemos las mismas capacidades, es cuestión de animarse”

 

Claudia Eichhorn estudió en la Escuela Técnica de Crespo y realizó cursos en Entre Ríos y otras provincias, especializándose en la reparación e instalación de equipos de refrigeración y termotanques. “No hay muchas mujeres en esta actividad, lo que también se ve en los talleres, donde generalmente el personal es masculino. Tenemos las mismas capacidades, lo que necesitan muchas mujeres es animarse a dar ese salto. Yo tengo en claro que por ser mujer, no me voy a privar de hacer tal o cual cosa. Esta semana estuve trabajando con un albañil, percutando un piso, si lo puedo hacer, por qué no lo voy a realizar. Hay que romper esa barrera y también es cuestión de tener la iniciativa de hacerlo” afirmó Eichhorn en el inicio de la charla con El Observador. Expresó que “desde muy chica me gustaba investigar sobre motores. Como mi hermano estaba en el rubro de la electromecánica, en la reparación de ventiladores, taladros, moladoras y demás, me fui interesando cada vez más sobre esta actividad. No me quedé solo en eso, sino que decidí llegar a otras ramas, por lo que hice cursos de refrigeración en Paraná, Santa Fe y Rosario, lo que hoy es mi salida laboral”.

– El 40% de los ingresantes a primer año en la Escuela Técnica de Crespo son mujeres, ¿hay un cambio de tendencia?

– Sí, cuando yo iba a la Escuela Técnica, hace 15 años, era un 90% de varones y 10% de mujeres. La mayoría de los compañeros que trabajan en refrigeración, son varones. Cuando iba a los cursos, era prácticamente la única mujer, me miraban y se sorprendían, era como que no encajaba en el ambiente, pero después re-bien con todos, demostraron un gran compañerismo. En Crespo lo mismo, me siento cómoda con lo que hago y puedo decir que nunca sentí algún tipo de discriminación. Sé que hay muchas mujeres que están en una situación parecida, que hacen de todo, por ahí tienen proyectos, pero los mismos quedan ahí, porque les falta esa fuerza de dar ese salto. Las animo a que lo hagan, hay que darle para adelante y cumplir con los sueños que uno tiene.

 

Mary Báez (remisera): “Este trabajo te va dando coraje y audacia”  

 

María Isabel Báez es hija de empleado ferroviario, tiene 4 hijos y desde hace 12 años maneja un remis, que además de ser su medio de vida, no duda en afirmar que es también su pasión. “Mary” también es conocida por su trabajo social, ya que durante más de 20 años dio catequesis en parroquias, fue dirigente de la Asociación de Bomberos Voluntarios y secretaria de la Subcomisión de Fútbol Infantil del Club Sarmiento y en la actualidad integra la comisión del Sindicato de Remises de Entre Ríos.

– ¿Cómo surgió la idea de manejar un remis, que hasta hace algunos años, era casi exclusivo de los hombres?

– Primero fui “basista” (receptora de los llamados en la remisería), hasta que un compañero me impulsó a que maneje un auto y una vez que estuve de ese lado, nunca más me senté en la base. Venía de una situación difícil en mi vida, tenía que salir a trabajar y surgió esta posibilidad y estoy muy contenta de haber elegido esta profesión. Si bien en esos momentos, la del remis era una actividad más de hombres, tengo que destacar que me han tratado de la mejor manera, de parte de mis compañeros siempre hubo una gran contención. Hoy somos 8 las mujeres que estamos en la actividad en Crespo y me gustaría nombrarlas: en mi empresa, mis compañeras son Gladis Eichmann, Alejandra Jacob, Silvina Roth, Agustina Torresín (telefonista) y de otras remiserías, Graciela Rosco, Silvia Baroli y Griselda Ulrich, además de Maira Román (taxista). Hay matrimonios que trabajan los dos, se turnan y así compensan. Lo que más complica de este trabajo, es la gran carga horaria. Para que quede un margen de ganancia, hay que esforzarse mucho…

– Para los taxistas y remiseros, un tema siempre candente, es cómo los afecta la inseguridad, ¿ha sentido temor alguna vez…?

– Estuve en zonas muy peligrosas, como en “Villa La Lata” en Rosario, donde fui a buscar pasaje y no me pasó nada, anduve en barrios difíciles de Paraná y en otros lugares donde no es fácil entrar, pero el trabajo te va dando el coraje, la audacia de seguir y la verdad, no pensás en tener miedo. Además, siempre llevo solo parte de la recaudación del trabajo diario, que es la mejor manera de prevenir que no te pase nada. En Crespo y la zona estamos bien, no hay problemas, sí nos sorprendió lo que ocurrió el año pasado, cuando tuvimos el caso de un remisero de Paraná, que en cercanías de nuestra ciudad, lo habían asaltado y agredido. En nuestra comunidad, generalmente esas cosas no pasan.

– ¿Se reserva el derecho de admisión…?

– Soy muy cauta en ese sentido y cuando veo que una persona no está en buenas condiciones, por ejemplo, porque ha tomado mucho alcohol, no lo subo y aviso de la situación. Nosotros tenemos esa facultad, porque somos trabajadores independientes.

– Estadísticamente se dice que la mujer tiene menos infracciones de tránsito en las calles, que para esta profesión es fundamental…  

– Es verdad, así lo dicen las estadísticas. Yo no tengo infracciones y he viajado por todo Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires. Este es un trabajo que me apasiona y el que lo hace, es porque le tiene pasión. Hay miles de manera de poder ganarse la vida, a mí se me dio esta posibilidad e hice de esta actividad, una profesión, aparte tengo mi carnet profesional para vehículos de emergencia. Como remiseros, no solamente llevamos a las personas de un lugar a otro, a veces hasta hacemos terapia con la gente, nos cuentan sus problemas y tratamos de ayudar. Con muchos abuelos por ejemplo, nos bajamos con ellos al banco, a la farmacia y en cuanto a los chicos, somos tutores educativos. Yo llevo muchos niños a la escuela y es una gran responsabilidad…

– ¿Por qué se interesó en incursionar en la vida política (es precandidata a diputada provincial)?

– Porque tengo conmigo esa pasión de servicio, así como lo hice en la parroquia, en un club o en bomberos, me gusta la política social y lo que digo es que la gente tiene que participar. No es que vamos a cambiar el mundo, pero se puede aportar desde nuestro lugar. Hay mucha necesidad de la gente, que quiere que le den una respuesta más rápida y ágil. Ya fui precandidata en las PASO 2017 y ahora me tocó desde otro ámbito y lo voy a afrontar como siempre lo hice, con toda responsabilidad. De la misma manera me convocaron desde el Sindicato de Remises de la provincia hace 2 años, integrando la comisión como vocal. No es para hacer una sindicalista de pleitos, sino para apoyar al rubro y ver en qué podemos mejorar…

– ¿Sintió alguna vez discriminación, por su condición de mujer, en sus actividades?

– Nunca, para nada. Es un problema que muchas veces se da en la sociedad, pero depende mucho de la “cabeza” que uno tenga, me va a afectar en la medida que dejo que me afecte…

 

Carolina Ramel (piloto): “Tenemos que seguir nuestros sueños”  

 

Carolina Ramel es una joven piloto de karting de Valle María, tiene 15 años, cursa el 4° Año (secundario) en IPD 185 “Espíritu Santo” de esa ciudad. Comenzó a correr en 2016, en el Torneo Victoriense, pero el año pasado se sumó al campeonato Río Paraná (en asfalto), que se disputa en el autódromo de la capital entrerriana, donde logró el subcampeonato anual.

En diálogo con El Observador expresó que “los comienzos de cada una de estas etapas deportivas fueron difíciles, más en un ambiente donde la mayoría son hombres. Cuando participé en las categorías menores, creo fue más fácil, porque eran chicos de mi edad. No veían tan raro que corra contra ellos. Ahora en las divisiones mayores, compitiendo con muchachos que algunos me doblan en la edad, a algunos no les causa gracia que una chica corra entre ellos, más si les gano (sonríe), pero siempre me respetaron y me trataron como una más. Me ayuda que soy de carácter fuerte, así me criaron mis papás y me enseñaron a luchar por lo que quiero, a hacer lo que me gusta, sin importar el género. En su momento, practiqué básquet, siendo la única mujer, ahora corro en karting y si Dios me lo permite, me gustaría algún día competir en autos. Nunca me sentí inferior a un hombre y mis pares no me lo hicieron sentir tampoco, soy una más del equipo”.

Como mensaje, les dice a las jóvenes mujeres de su edad, “que tenemos que seguir nuestros sueños, abrirnos camino, luchando por nuestros derechos, que siempre busquemos la auto-superación y que no nos rindamos ante las complicaciones que se puedan presentar”.

 

Las mujeres y su pasión por el fútbol  

La crespense Florencia Senger es una joven que se destaca en fútbol femenino, representó a Argentina y jugó profesionalmente en el extranjero. Consultada por El Observador sobre esta fecha especial, consideró que “el 8 de marzo es un día en la que una se detiene a repensar lo que representamos como mujeres, renovando nuestro compromiso de seguir luchando por un mundo más equitativo y justo. La mujer hoy en día, ha logrado avanzar mucho en sus derechos, libertades, lo que se está intentando conseguir dentro del fútbol, que es una de las disciplinas que ha sido pensada desde el ámbito masculino y con cierto grado de discriminación. Y aún hoy, todavía está instaurado que es un deporte para varones. Igualmente, podemos decir que gracias a distintas luchas, logramos nuestro espacio, pero para seguir avanzando, necesitamos más ayuda, en lo que respecta a infraestructura, apoyo social, moral y económico. En Crespo mismo se podría empezar con escuelas de fútbol femenino y por qué no pensar en algún momento en tener categorías infantiles de chicas, sería hermoso que las mujeres, desde niñas, tengan su lugar para la práctica de esta disciplina”.

Por su parte, Marianela Magallán (madre de dos hijos), jugadora del equipo femenino “Las Águilas” de General Galarza, recordó que desde que comenzaron a armar el plantel, había muchas interesadas, más allá de los temores propios de iniciar algo nuevo. “En esos momentos, había muy pocos que colaboraban, era como que sentíamos que nos minimizaban, porque éramos mujeres. Pero eso ha cambiado mucho, hay más aceptación en todos los sentidos, porque tanto los hombres como las mujeres podemos trabajar en lo que sea a la par”.

Como mensaje dijo que si bien es un día para reflexionar, “la mujer no necesita de una fecha especial (de celebración), merecemos respeto todos los días, segundo a segundo. Y también, debemos hacernos valer por sí mismas, lo que hará que los demás, nos respeten más”.

 

Lorena Hillairet (dirigente deportiva): “El respeto se logra haciendo bien las cosas y siendo humildes antes que todo”

Lorena Hillairet (madre de un hijo) se crió prácticamente en el “mundo motor”, acompañando a su papá Roberto, fundador de la Asociación de Pilotos Entrerrianos de Motos y Autos (APEMA), entidad en la que es vicepresidenta. “Desde los 15 años que trabajo de lleno en lo que es la actividad de las dos ruedas, fiscalizando carreras y también en algún momento, incursionamos en las de autos, recorriendo distintos puntos de la provincia. Me siento muy orgullosa de ser vicepresidenta de la Asociación, un lugar al que me costó llegar, pero lo logré. Lo importante es que me he ganado el respeto de los pilotos y el reconocimiento de parte de ellos por el trabajo realizado. Hoy en día, la mujer ha demostrado que puede hacer muchas cosas, al igual que el hombre. En esta disciplina, hay pilotos entrerrianas que nos han representado a nivel nacional, en el Enduro del Verano que se realizó en Villa Gesell, donde Valentina Basso del Pont de La Paz tuvo una destacada actuación. Ni hablar si nos vamos a nivel internacional, lo que han hecho mujeres en el Dakar, como por ejemplo la española Laia Sanz. Cada uno debe ganarse su lugar, sin importar si es mujer o varón y considero que el respeto se logra haciendo bien las cosas y siendo humildes antes que todo”. Como mensaje, en diálogo con este medio expresó que “la mujer no debe bajar los brazos y debe ir tras sus sueños y metas, sin importar su género” finalizó.