Hallaron miles de peces muertos sobre la costa del río Uruguay

e_1424295683Varios pescadores que concurren al río Uruguay, bajando por calle 25 de Mayo, se preguntan si el río está contaminado. Se encontraron con la playa tapizada de peces muertos. Una situación similar se vivió aguas abajo, en Benito Legerén.

“Eran más de 3000, todos de entre 750 gramos y un kilo y medio”, algunos –aseguró- “todavía estaban boqueando y otros ya habían muerto”, dijo uno de los pescadores. 

“Es la primera vez que encontramos tantos sábalos muertos, hay días que se encuentra uno o dos, pero nunca nos había ocurrido esto de encontrar miles de peces muertos en la playa”, agregó. 

Felipe Galli, dijo que la mortandad se dio entre “el ex lavadero de jaulas del ferrocarril y unos quinientos metros por debajo de la calle 25 de Mayo” atribuyéndola a “algún producto químico que, seguramente, tiraron los ferroviarios” y alentó la tesis de que los brasileños que tenían anteriormente a su cargo el ferrocarril: “usaban productos contaminantes para lavar los vagones”. 

“Lo peor –agregó Galli- que ahora hay un cuarto de los pescados que había ayer, calculo que unos 2000 fueron retirados por familias que viven aquí cerca y se los llevaron para comer, aunque se les dijo que si murieron por algo sería y que posiblemente estaban contaminado, pero nadie quiso hacer caso, hasta cargaron un carro con pescado y se fueron contentos pero esto, dijo, “puede tener consecuencias de salud para quienes los ingieran”. 

La mortandad fue muy grande, no se sabe que la produjo y nadie investiga el hecho. Una situación similar se vivió ayer, aguas abajo, en la zona de Benito Legerén, consignó El Sol.

Cientos de peces muertos fueron hallados en la costa y comenzaban a descomponerse por el calor y las moscas que invadieron el lugar. La mayoría corresponde a la especie de sábalos de diferentes tamaños que resultaron afectados. 

Los vecinos del lugar lo calificaron como un “desastre ambiental” y esperan que los organismos competentes como la CARU den explicaciones de lo que está sucediendo con los sábalos que integran la fauna ictícola y que dejan de ser alimento para las familias de pescadores. 

Sin embargo una teoría, surgió a raíz de los fuertes olores que se registraron ayer en la zona de la costanera, hace algunas semanas medios de la ciudad de Salto denunciaron que el frigorífico de La Caballada, actualmente propiedad de capitales extranjeros arrojan efluentes al río, desde su planta en la costanera sur de la ciudad hermana sin el debido tratamiento. 

La teoría de los vecinos de Legerén dice que como el sábalo se alimenta de sedimentos y de barro, tal vez los ejemplares muertos se alimentaron de los residuos de la planta que quedaron en el fondo del río y por las constantes corrientes de las acostumbradas y sorpresivas evacuaciones de agua de Salto Grande, llegan hasta el sur de Concordia, más precisamente a Benito Legerén. 

Son todas teorías; pero lo cierto y real es que los vecinos están muy preocupados por esta situación y por la salud de nuestro río y de aquellos que se alimentan gracias a él.