Desarme: Gobierno paga hasta $ 600 por entrega de revólveres y municiones

El ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Julio Alak, junto al gobernador bonaerense, Daniel Scioli, pondrán en marcha este lunes la segunda etapa del Plan Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego, en la que el Estado planea recaudar más de 100.000 de estas unidades.

Participarán el titular de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal; el director nacional de Armas, Andrés Meiszner, y el intendente local, Fernando Gray, entre otras autoridades.

“El Plan Nacional, al presente, logró sacar de circulación 107.761 armas de fuego, que representa alrededor del 10 por ciento de las armas que figuran registradas en el país”, informó el gobierno de la provincia de Buenos Aires a través de un comunicado de prensa.

“El esquema en funcionamiento contempla retribuciones económicas de hasta 600 pesos para quienes entreguen sus armas y municiones, de acuerdo con lo pautado por la cartera nacional”, sostiene el comunicado.

A las casi 108 mil armas sacadas de circulación se agregan 774.679 municiones, según los datos oficiales, y el método de destrucción utilizado es por trituración y fundición por hornos de altas temperaturas.

El pasado sábado 19, Alak y Casal habían encabezado en una planta siderúrgica de Campana el acto de destrucción de casi 7 mil armas que estaban en depósitos judiciales, con lo que el Gobierno nacional logró sacar definitivamente de circulación un total de 132 mil dispositivos.

El Plan Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego cuenta con la adhesión de la Asociación Civil Alfredo Marcenac, una ONG que apoyó y difundió el programa desde su nacimiento, y también con el apoyo de diferentes cultos religiosos que promueven el desarme (entre otras organizaciones, Religiones por la Paz y la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina).