La pastora de la Iglesia Evangélica Congregacional local, Saionara Leite de Achitte, contó a El Observador sobre el proyecto que prevé la construcción del Monumento a la Biblia. En el mismo intervienen la Parroquia San José, la Iglesia Congregación Evangélica del Río de la Plata, la Evangélica Bautista, Congregación Evangélica Luterana San Pablo, Evangélica Congregacional, Adventista y Evangélica Pentescostal Estrella de Oriente, con el apoyo del municipio que encabeza la intendente Julia Witman, que cedió una parte del Centro de Educación Física Nº 8, donde se emplazará dicho monumento.

“La Biblia tendrá un tamaño 50 x 33 centímetros, la que irá dentro de una esfera y con una estructura que le dará marco. Cada 2 ó 3 días se darán vueltas las páginas para que los vecinos puedan acceder a la Palabra del Señor” recordó la pastora, quien detalló que “en estos días tendremos terminada una parte de la estructura y como septiembre es precisamente el Mes de la Biblia, queremos exponerla en la municipalidad, hasta que pueda ser colocada, una vez que se haga la base, en el predio del polideportivo. Habrá columnas de aproximadamente 4 metros de altura, que representan a Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo y un techo, que significa la protección de Dios sobre la tierra, donde estará su palabra”.

La pastora expresó que “desde un primer momento, las 7 Iglesias trabajaron en el proyecto, a las que se sumó posteriormente la Comunidad Judía. En lo económico, llegamos a un monto de más de $ 30.000, ya se pagó al escultor y se entregaron $ 10.000 para la adquisición de ladrillos a la cooperativa local, que nos ‘congeló’ el valor de los mismos para que podamos efectuar la compra de la otra parte. Después tenemos que hacer una inversión en las luces y en cuanto a la mano de obra, tenemos la colaboración de vecinos y el municipio ayuda con materiales y aporta las máquinas para la preparación de los 18 metros cuadrados del terreno que ocupará el monumento. Tengo que destacar el gran apoyo que tenemos, de las familias, de las empresas de Galarza y de otras localidades y lanzamos el plan ‘Sumar Ladrillos’, para levantar la construcción. Como ministros del Evangelio deseamos que la palabra de Dios quede grabada en las personas que van a tener la oportunidad de acercarse a la misma. Es necesario que esa palabra llegue y que se transmita, para fortalecer y transformar nuestros corazones”.