Fortalecen en Entre Ríos medidas para prevenir y tratar el cáncer de cuello de útero

Con el fin de agilizar la concreción de los estudios específicos para la detección del cáncer de cuello uterino, el Ministerio de Salud de la provincia se encuentra propiciando una serie de acciones de promoción, prevención, diagnóstico y tratamiento.

La Dra. Claudia Enrique, jefa del Programa de Prevención del Cáncer de Cuello de Útero en Entre Ríos, destacó la importancia de contar con estrategias de inmunización contra el Virus del Papiloma Humano, para niños y niñas de 11 años y también la accesibilidad a los estudios de papanicolau en todos los servicios de atención primaria de la salud. Otra importante implementación, remarcó, es el trabajo “de quienes hacen el seguimiento respetuoso y oportuno, a través del sistema informático, de las mujeres con diagnósticos para garantizar derivaciones y tratamientos”.

Recordó que para diagnosticar la enfermedad en estadios iniciales, cobran valor los estudios de papanicolau y para prevenir a niños y niñas de 11 años existe la vacuna contra el VPH. En cuanto a la mortalidad en la provincia por esta causa, la especialista indicó que se registran por año entre 5 y 6 muertes cada 100.000 mujeres. De esta manera, Entre Ríos “está por debajo de la media nacional y con índices similares a los que tienen Córdoba y Santa Fe”.

Cabe destacar que las acciones de prevención, detección y control conforman uno de los ejes de la política sanitaria entrerriana desde 1998 y con las actividades desarrolladas se propone detectar la enfermedad en estadios tempranos, lo que posibilita a la mujer diagnosticada “conservar su calidad de vida e incluso su posibilidad de tener hijos”.

Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, “el cáncer, que constituye la segunda causa de muerte en Argentina, concentra casi la quinta parte de todas las defunciones y representa una de las cuatro enfermedades crónicas no transmisibles más relevantes”. Si bien “la mortalidad por esta causa ha descendido a lo largo de los últimos 18 años en el país, tanto en hombres como en mujeres, se estima que para el 2035 se duplicará tanto la incidencia como la mortalidad por esta enfermedad”.