Explican porqué en Crespo se podrían seguir realizando eventos con protocolos

Estuvieron esta semana en El Observador y el programa “Fernando Huck Reportajes” de Canal 6 ERTVRoberto Engel (empresa Te hacemos la Pata); Silvia Adur (servicio gastronómico) y Marcela Oliviero (Catering Artesanal Eventos y Fiestas), quienes contaron sobre las dificultades que atraviesa el sector por la pandemia de Covid-19 y de la movilización que hubo en Crespo, solicitando que se puedan realizar eventos, los que quedaron suspendidos tras las restricciones impuestas las semana pasada por el Gobierno Nacional. Aseguran que cumpliendo los protocolos vigentes y en ciudades que tengan controlada la situación sanitaria, podrían realizarse. Al respecto, Engel comentó: “Lo de la convocatoria del domingo surgió de una publicación que realizó una persona, que escribió que se podían dejar de lado “las fiestitas”, familiares y sociales y me sentí tocado. Le contesté sobre lo que pensaba sobre ese tema y que no éramos solo el sector gastronómico. Después de esa respuesta, se comunicaron muchas otras personas conmigo, solidarizándose por la situación y preguntando si no se podía hacer alguna otra cosa, porque por ahí discutimos en las redes sociales y queda ahí. Y surgió la idea de un encuentro abierto en Plaza Sarmiento, porque no era solo para la parte de servicios gastronómicos y tuvimos una muy buena respuesta en todo sentido. Cuando arrancamos, a las 18.00, éramos pocos, pero con el pasar de los minutos se fueron acercando más y más personas. Fue como una asamblea pública, es decir, cualquiera podía opinar sobre estas restricciones y salió el temas de las libertades, de no poder circular hasta cierta hora, generándose un ida y vuelta entre los presentes. Acordamos hacer una página en Facebook, que se llama ‘Ciudadanos Libres’, con una consigna, que las libertades de los ciudadanos y ciudadanas no se ceden, ni se negocian. Queremos que la gente vuelque sus opiniones en esa página y lo que recalcamos es que no es cuestión política, porque no nos embanderamos en ningún partido. El domingo solo había banderas argentinas, ningún tipo de cartelería partidaria. La realidad de Crespo es otra y entendemos que las condiciones están dadas para que podamos seguir nuestra vida normal. Tenemos controlado el tema de la circulación del virus, por lo que no hay razones por lo cual seamos encerrados, al menos en esta ciudad. Y si en algún momento se dispara, se para, pero mientras tanto, tenemos que seguir trabajando”.  

– El rubro de gastronomía, DJ, decoración, fotografías, filmaciones, están pasando por momentos muy delicados desde el inicio de la pandemia y habían tenido una temporal reactivación a principios de año…

– (Adur) Sí, estuvimos 11 meses sin trabajar en 2020 con los eventos, por lo que en mi caso, me tuve que reinventar, con platos especiales los fines de semana. Con los empleados nos pusimos de acuerdo, porque son excelentes y me acompañaron y la peleamos juntos. Y lo supieron entender. Pero nos vimos muy perjudicados económicamente, porque se hicieron ciertas inversiones y hay deudas que cancelar. Hay muchas cosas que seguir sosteniendo y se nos hizo muy pesado y el problema que se viene, son ahora las reprogramaciones. El otro día publiqué en Facebook que estaba devastada, no tanto por mí, sino también por escuchar llorar a las quinceañeras, a las parejas que tuvieron que suspender sus bodas para más adelante, de tener, como ocurrió el fin de semana pasado, esa angustia que faltaban horas para la fiesta, con todo preparado y se tuvieron que suspender. Fue un shock. Para algunos eventos, fue la quinta vez que se reprogramaron y no podemos tomar uno nuevo, porque hay que darle lugar a los que vienen de atrás y es todo una pérdida. Nuestro trabajo es esencial, tengo una amiga que me dijo: “Silvia, es hora que empieces a pensar en dejar lo que estás haciendo, porque viene para mucho este tema” y le contesté que hace 40 años que me dedico a esto y… ¿qué hago si no es esto? Ha sido siempre mi fuente de ingresos, es lo que amo y no es tan fácil cambiar. Y además, qué hago con los compromisos de fiestas asumidos…  

– (Engel) Es como que nos encerraron a todos en una misma bolsa, no hay planificación. Creo que puede haber ciertas concesiones, justamente en las ciudades con poca circulación del virus, como ocurre en Crespo. No se puede comparar la circulación de Capital Federal con Aldea San Juan o San Rafael y las restricciones son las mismas. Y se metieron con la noche, determinaron que ahi están las mayores restricciones y donde menos circulación de gente hay. Durante el día, en Capital Federal, la gente viaja en trenes, colectivos, no hay distanciamiento, pero no se puede hacer una fiesta en Crespo, respetando los protocolos. Un evento se hace con el 50% de la capacidad del salón, la gente del catering con sus guantes, distancia, sanitización, control de temperatura, entonces ¿por qué no se puede hacer?, ¿cuál sería la razón exacta…? Se ha demostrado, en Crespo, que el control se hace bien y las cosas se pueden realizar y no hay “disparada de virus”, cuando en otros lados se les viene el mundo abajo. El domingo lo charlamos en la convocatoria, no pasa por quién aplica las restricciones, sino por la restricción misma, pasa por lo que está sucediendo y no hay razón valedera para que estén. Hay provincias que no tienen casos y cómo van a pagar las consecuencias, porque a Capital Federal se le disparó todo. En su momento, la potestad se la pasaban a los gobernadores y ellos a los intendentes: ¿cuál es el problema que se haga responsable el presidente municipal de cada ciudad de dar los permisos, de controlar, como se venía haciendo acá? ¿Se desmadró todo en Crespo con una fiesta? No, no pasó nada, porque se cumplieron los protocolos. El tema es cuánto más podemos aguantar. Lo que se hizo el año pasado de cerrar todo, no sirvió. Tenemos 60.000 muertos, la economía desecha…  

– (Oliverio) Lo que pretendemos es que todos podamos trabajar, para ser libres como alguna vez fuimos. Hace 4 años que estoy en esta actividad y me había comprado herramientas de trabajo, porque las necesitaba y que las tengo que pagar en cuotas… Son días en que no sabemos cómo seguir…

– (Adur) De todos los eventos que he tenido de enero a la fecha, no hubo un solo contagiado y no eran eventos chicos. Siempre se mantuvo el protocolo, el distanciamiento de las mesas, todo muy cuidado. En los cumpleaños de 15, notaba la alegría de los chicos de poder celebrar con las quinceañeras que ya cumplían 16 y cómo se cuidaban. La gente se fue adaptando a este contexto y cambió sus actitudes. Es algo que se puede hacer muy bien. Trabajo mucho en Paraná y en los baños hay personas con alcohol en gel, toman la temperatura, pienso que mientras cada uno de nosotros nos responsabilicemos y cuidemos, se puede y si viene una 2ª ola, que se nos trepa como pasó en algún momento, es otra cosa, pero mientras tanto, se puede lograr un equilibrio…

– (Engel) El año pasado, de marzo a julio estuvimos parados sin sentido. Nos encerraron a todos y se hubiese podido seguir y en la ola grande, sí, cerrar. Tampoco ayuda la información nacional: todos los días catastróficamente, ametrallando con cifras alarmantes…

– ¿Tuvieron apoyo estatal…?

– (Adur) En mi caso, no tuve subsidios. Sí agradecer a los clientes que nos acompañaron en la cuarentena. Pese a no trabajar, tuvimos que seguir pagando impuestos y uno se empieza a atrasar, porque es pagarlos o comer. Se genera una cadena y se hace una pelota que no se sabe cómo frenar…  

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