Explican por qué el “Día de los Santos Inocentes” no es para bromas

Todos los años, el 28 de diciembre se realizan bromas a familiares o amigos por el Día de los Inocentes. Sin embargo, la efeméride tiene un origen trágico que pocos conocen, es la conmemoración de un episodio hagiográfico del cristianismo: la matanza de niños menores de dos años nacidos en Belén (Judea), ordenada por el Rey Herodes I, “con el fin de deshacerse del recién nacido Jesús de Nazaret”.

Fray Nelson Medina, conocido sacerdote dominico que realiza un amplio apostolado en redes sociales, afirmó que este día no debe ser ocasión para bromas o chistes: “El buen humor es un ingrediente importante de nuestra vida, para nuestra salud mental y nuestra relación con otras personas”, indicó el también Doctor en Teología Fundamental, sin embargo, “no todo es objeto de humor o de chiste. Efectivamente, allí donde hay injusticia, crueldad no hay espacio para el humor”.

El sacerdote indicó a ACI Prensa que “si recordamos en los Evangelios qué fue lo que sucedió cuando murieron aquellos niños inocentes, entenderemos que hubo una espantosa crueldad, que está claramente mostrada en la pena de muerte para estos pequeñitos… Y la matanza de inocentes continúa en nuestro tiempo, de muchas maneras. Hay niños que mueren de hambre, hay niños que mueren de enfermedades que se hubieran podido prevenir perfectamente y sobre todo tenemos el caso de tantos niños y niñas que son asesinados antes de nacer por medio del aborto. El 28 de diciembre no debería ser ocasión de superficialidad o de banalidad, sino más bien de agradecer a Dios por el testimonio de estos pequeños mártires y de reflexionar sobre el inmenso valor de la vida humana”.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.