Encuesta revela que el 60% de los argentinos no cambia sus hábitos de vida, por falta de voluntad

Cambiar de hábitos es una de las acciones más difíciles y aunque está comprobado que es posible, más de uno pierde la batalla y triunfan las costumbres ya arraigadas. De acuerdo con un estudio encarado por la Sociedad Argentina de Cardiología, el 90% de los argentinos considera que debe hacer un cambio para llevar una vida más saludable, pero el 60% asegura que no lo hace “por falta de voluntad”.

El informe consistió en encuestas a hombres y mujeres de más de 16 años de todo el país. El 67% reveló que había intentado modificar alguna conducta en el último año, pero apenas la mitad de ellos (51%) había logrado sostener la mejoría durante 12 meses, señala la encuesta. Entre las razones más esgrimidas entre aquellos que no lo lograron, se mencionaron la falta de voluntad (60%), de tiempo (25%) y de dinero (8%).

El Dr. Jorge Tartaglione, cardiólogo y miembro de la SAC, expresó que “es complejo combatir aquellos hábitos arraigados que atentan contra una vida plena y sana, pero la gente ya sabe qué es lo que hace mal”. Acotó que “falta generar motivación y allanar el camino, explicando cómo llevar a la práctica el conocimiento que tiene la gente”.

Tartaglione, quien impulsa una iniciativa llamada “Revolución Saludable”, señaló que “cuando los protagonistas de nuestra vida son el estrés, lo instantáneo, la comida poco saludable y el sueño escaso, invitamos a bajar un cambio y comenzar a preocuparnos por nuestro cuerpo”.

Las modificaciones más fáciles de sostener en el tiempo fueron realizarse chequeos de salud periódicos (90% de los que se lo propusieron), disminuir el consumo de sal y carne (81% y 79%, respectivamente) y moderar el consumo de alcohol (73%), mostró el relevamiento. Asimismo, si bien en la encuesta se notó que el 93% considera que la decisión de cambiar de hábitos es personal, tres de cada cuatro coincidieron en que es difícil lograrlo si el entorno no acompaña.

“El beneficio a largo plazo es que estas medidas contribuyan a prevenir enfermedades crónicas no transmisibles, que son causas severas de mortalidad y morbilidad”, apuntó el cardiólogo con 35 años de trayectoria en el área.