En el INTA obtienen una nueva variedad de avena, recomendable para pastoreos intensivos

En Argentina, la avena es uno de los más importantes cereales de invierno destinados a la alimentación del ganado. Días pasados, el INTA Bordenave (Buenos Aires) presentó a “Elizabet”, un nuevo cultivar de este cereal que se destaca “por el alto potencial de rendimiento de forraje y por su amplia adaptabilidad a diferentes regiones del país”.

Fernando Giménez, especialista en mejoramiento genético de cereales y oleaginosas del INTA, comentó que “la obtención de ‘Elizabet INTA’ generará un cambio cualitativo en el cultivo de avena para pastoreo”. De hecho, “por las aptitudes para el pastoreo, el altísimo potencial de producción de pasto, la amplia adaptabilidad a diferentes regiones y la excelente sanidad, creemos que este novedoso cultivar de avena blanca será uno de los más sembrados, tanto en Argentina como en países limítrofes”, aseguró Giménez.

Tras ser evaluado durante los últimos 3 años en ensayos comparativos en más de 10 ciudades argentinas, desde Mercedes (Corrientes) hasta Viedma (Río Negro), se destacó por su alta y estable producción de forraje. Con precipitaciones abundantes y un manejo intensivo en la evaluación, la nueva variedad alcanzó un récord de producción de forraje: “En 5 cortes, obtuvimos más de 10.000 kilos de materia seca por hectárea”, expresó Giménez.

“Elizabet INTA”, gracias a su excelente comportamiento a frío y gran capacidad de rebrote, mantiene altas tasas de crecimiento desde fines del otoño y principios del invierno. Para Giménez, “esa, es una de las principales características que la hace muy recomendable para pastoreos intensivos”. Sin embargo, en comparación con cultivares graníferos y doble propósito – como “Carlota INTA” – tiene un potencial de rendimiento en grano intermedio.

En cuanto al aspecto sanitario, explicó el profesional que tiene un excelente comportamiento a la roya de la hoja. “Registramos los niveles de incidencia y severidad más bajos incluso en las localidades donde hay mayor presión natural de esta enfermedad, como en Paraná, Reconquista y Mercedes (Corrientes)”.

Recientemente, esta nueva variedad fue inscripta en el registro del Instituto Nacional de Semillas (INASE). “Es importante que el productor pueda asegurarse que el cultivar sea el indicado, debido a que, de lo contrario, sembrará semillas que solo tendrán un corte, con pobre rebrote y con una producción de forraje de hasta un 80% menos”, analizó Giménez para quien “al final de cuentas, esto le genera significativas pérdidas económicas”.