En cercanías de La Picada fueron detenidos bovrilenses por transportar estupefacientes penalizados por la ley

En horas de la noche del domingo sobre la Ruta Nº 10, fue interceptado un VW Polo color gris, en el que se habría logrado detectar la existencia de varias tizas de cocaína y cigarrillos de marihuana, en cantidades que excederían las contempladas para consumo personal.

Trabajaron en el lugar del hecho personal de la Comisaría de La Picada y una comisión de la Dirección de Toxicología, quienes comprobaron que en el automóvil sus ocupantes oriundos de Bovril, regresaban a esa ciudad luego de haber estado en Paraná donde, se presume, compraron la mercancía ilegal con la idea de revenderla en su localidad de origen, consignó El Diario.

El subdirector de Toxicología, Comisario Mayor José Alejandro Lauman, manifestó: “Estamos realizando los primeros pasos del procedimiento, pero podemos afirmar que se trata de un secuestro positivo de estupefacientes, entre los cuales podemos encontrar sustancias penalizadas por la Ley de Estupefacientes para su comercialización y traslado”.

El hombre que conducía el vehículo de 33 años, se identificó como remisero, pero por el momento quedó demorado junto a las otras personas, entre las cuales se encuentra una mujer de 32 años.

Se habrían logrado secuestrar 10 tizas de cocaína de aproximadamente 15 gramos cada una, lo que hace posible lograr 150 dosis de alta pureza y que en el proceso de “estiramiento”, tal como se le dice en la jerga delictual al acondicionamiento de la droga con otras sustancias para lograr más dosis, podrían llegar a lograrse más de 200 unidades para la venta. También fueron decomisados 40 cigarrillos de marihuana y la suma de $ 6.800 en efectivo.