En 4 años, las naftas Premium aumentaron más del 400%

En la madrugada del domingo 1 de diciembre, se registró un nuevo aumento (10º del año) en los precios de los combustibles. En este caso, el ajuste fue superior al 6%, por lo que las naftas Premium están cada vez más cerca de los $ 70. En la estación YPF LAR de Crespo, la Infinia se vende a $ 66,24 el litro, cuando en diciembre de 2015, el producto valía $ 16,22, es decir $ 50,02 menos. En porcentajes, el aumento en estos 4 años, desde la asunción del actual gobierno nacional fue del 408%, es decir muy superior al índice inflacionario del 2016, 2017, 2018 y lo que va del 2019.

En tanto, la nafta super de YPF se comercializa en la actualidad en la ciudad a $ 59,34 y el diesel a $ 54,54. Si nos retrotraemos a fines del 2015, los precios en la misma estación por esos productos eran de $ 14,63 y $ 12,82, respectivamente. En esos casos, medido en porcentajes, los incrementos fueron del 405% y 425%.

Cabe acotar que similares porcentajes se dieron en las otras petroleras.

 

PIDEN UNIFICAR PRECIOS

 

Quienes recorren el país, notan con asombro las injustas diferencias de precios que hay entre las provincias. Por ejemplo, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), el litro de nafta super de YPF se vende a $ 53,34, es decir $ 6 menos que en Crespo y en la Premium, la brecha es de $ 4,70, también más cara en la Capital de la Avicultura.

A nivel nacional, dirigentes políticos, sociales, académicos, economistas y referentes del sector expendedor, piden que se aplique un valor uniforme del litro de nafta y gasoil en todos los puntos del territorio nacional, como era obligación en el pasado.

Walter Ceballos, diputado con mandato cumplido de San Luis, impulsor de esta iniciativa, planteó que resulta injusto que se genere tanta brecha. Propuso que para balancear estas diferencias, se compense el costo logístico con el impuesto a los combustibles líquido y en el marco de la autonomía, cada una de las provincias resuelva con cuánto más o menos grava a los combustibles, con lo cual se podría llegar a tener un precio uniforme. Recordó la necesidad de revisar la cantidad de impuestos provinciales y municipales que afectan al precio final de cada litro, dependiendo de la zona donde se venda, como por ejemplo “la tasa ambiental” o la “tasa vial”.