En 2018 murieron 20 personas por día en accidentes de tránsito. Opina un especialista en seguridad vial

Un informe de la Asociación “Luchemos por la Vida” revela que en 2018 fallecieron 7.274 personas en accidentes de tránsito en nuestro país, lo que equivale a 20 muertes por día, siendo la primera causa de decesos en menores de 35 años. En las estadísticas además se señala que más de 120.000 personas resultaron heridas en esas y otras colisiones y vuelcos en las rutas argentinas.

Entre las principales causas se encuentra la alta velocidad y el adelantamiento indebido (doble franja amarilla). También la ingesta de bebidas alcohólicas en conductores, “lo que hace que las respuestas y las maniobras, ante cualquier eventualidad de la ruta, o la calle, sean lentas” expresaron desde la ONG.

La provincia que más muertes registró en 2018 en accidentes de tránsito fue Buenos Aires, con 2.158 víctimas. Le siguen Santa Fe y Córdoba, con 626 y 439, respectivamente. En Entre Ríos se registraron 241 muertes por este motivo, mientras que en 2017 fueron 316.

Santiago Laumann, especialista en Seguridad Vial y docente universitario, expresó que “sobre este tema venimos hablando desde hace más de 25 años. Vemos que hay muy buenas intenciones, pero con eso solamente, no alcanza. Hablamos de un problema cultural y de educación de la población, no es solamente inconvenientes de las rutas o del clima. Desde 1994 está la Ley N° 24.449, que muchos la nombran y pocos la cumplen, que estipula que es obligatoria la ‘Educación Vial’ en los niveles primarios, secundarios y terciarios. Si no educamos, no vamos a poder lograr que dentro de 20 años esto se revierta. Mientras tanto, hay que trabajar en una política de seguridad vial y tenemos herramientas y recursos humanos para hacerlo. Basta ver los medios todos los días para darse cuenta que como conductores nos interesa llegar rápido, en rutas que muchas veces no están en condiciones, con vehículos a los cuales no se les hizo la revisión o no se tuvo en cuenta cuántas horas lleva manejando y así, ocurre lo que está pasando. Días pasados regresaba de Corrientes con mucha lluvia y no puedo explicar cómo me pasaban los autos en la ruta, con un atrevimiento total, francamente juegan a la ruleta. Y pasa porque, como dije, falta educación vial en la educación formal y a su vez, falla el sistema, que no aplica los castigos para los que generan los accidentes. No es simpático hablar de estos temas y más en estos tiempos, tampoco genero simpatía al hablarlo de esta forma, pero tenemos que ser muy francos y duros en esto. Los sistemas de habilitación (de licencia) son débiles en algún aspecto, no es que sean malos, sino que deben tener un mayor rigor” expresó en diálogo con el programa “Mañana de Todos” de FM Libertad 98.3.

– ¿Se necesita ser más exigente a la hora de entregar la licencia de conducir?

– Lamentablemente tenemos que ser conscientes que no hay preparación anterior para el manejo de un vehículo de distintos portes, ya sea uno particular, privado, camión, colectivo de corta o larga distancia o un urbano. El cumplimiento de las normas es un tema complejo, sabemos que en Argentina es un tema cultural, que existen las mismas, pero no las cumplimos, porque precisamente tenemos una cultura de la fragilidad de respetar las normativas. Por decirlo de alguna manera, nos gusta ser “piolas”. En Argentina, tenemos el agregado por año de más de 800.000 vehículos nuevos, que se incorporan a las rutas y calles y si le sumamos todo este combo peligroso de lo que estamos hablando, el riesgo aumenta…

– En Entre Ríos bajó el número de fallecidos (en 2018 fueron 241), pero sigue siendo un número importante de familias destruidas…

– En 2007 estábamos en alrededor de 300 y si bien el número de fallecidos bajó en Entre Ríos, no mermó la cantidad de siniestros. En Argentina fueron más de 7.000 los decesos, es una locura. Se dice que los resultados, con un buen trabajo en la educación, recién se verán dentro de 20 años, entonces el problema es, ¿qué hacemos en lo pronto…? Y lo que se necesita es ser muy riguroso con el tema de la extensión del carné, que antes estudien parte de la ley, donde se dice qué se debe hacer ante determinadas acciones, cuánto se tarda en frenar, que son cuestiones básicas que debe saber todo conductor. Hay material que sale desde el Consejo General de Educación, se tiene una muy buena intención en ese sentido, pero la aplicación debe mejorarse. En un manual que leí, decía que a un chico de 3° grado le tenemos que enseñar la tasa de siniestros y yo pregunto, ¿para qué a un chico de esa edad…? Lo que tienen que hacer, es enseñarles a cruzar la calle como peatón, a reconocer el semáforo, a ser un buen ciudadano. Alguien dijo alguna vez, ¿cuál era el sentido de educar? Y recuerdo la palabra de un filósofo que decía que el objetivo de la educación era el deseo de convertirse en un buen  ciudadano y hoy vemos que no somos buenos ciudadanos, por cómo nos comportamos. Debemos ocuparnos para que la persona que se conduzca en la vía pública sepa que tiene reglas, normas, conductas, tanto el que maneja un camión, colectivo, auto, moto o bicicleta, como el peatón. Hay gente en Entre Ríos muy preparada en esta temática, que sabe mucho y son pocos consultados. Es decir, hay recursos para hacer un trabajo serio y en conjunto, con los gobiernos municipales.