El de pulmón, sigue siendo el cáncer por el que mueren más argentinos. Llaman a fumadores a hacerse chequeos anuales

De las muertes por cáncer en Argentina, el 15% fueron de pulmón, sobrepasando al de colon y cérvix y siendo superado solo por el de mama, en la población femenina. Esta elevada cifra está relacionada con que la mayoría de los casos se diagnostican en estadios avanzados, ya que solo el 20% se descubre en etapas tempranas, con chances de tratamiento curativo.

Esta enfermedad afecta fundamentalmente a los grandes fumadores, pero en los últimos años se está dando un cambio progresivo en las características de la población de pacientes. Aunque los hombres siguen representando a la mayoría de los afectados, hay una proporción creciente de mujeres que padecen cáncer de pulmón y, muchas de ellas, no han fumado.

Profesionales de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria recordaron que “la principal causa de este tipo de cáncer continúa siendo el tabaquismo, pero al menos un 25% de los casos se da en no fumadores, por factores como la exposición ambiental, por tabaquismo pasivo, debido al humo de leña, al asbesto y ciertos virus oncogénicos.

Se consideran pacientes de mayor riesgo, aquellas personas mayores de 55 años, fumadores o que estén o hayan estado expuestos secundariamente al humo del tabaco o de la combustión de compuestos orgánicos. También aquellos que han padecido otros cánceres y los portadores de enfermedades pulmonares crónicas.

“En los casos en que se manifiesta clínicamente, el principal síntoma que se presenta es la tos, expectoración con sangre, falta de aire y dolor torácico. Puede ser descubierto como un hallazgo incidental en una radiografía o tomografía de tórax, en forma de nódulo o masa pulmonar” remarcan desde la AAMR.

Para dar con un diagnóstico definitivo, “es necesario realizar una biopsia, es decir, el análisis de una porción del tejido afectado. Este estudio es realizado por un médico patólogo, que se encarga de determinar si hay células malignas en la muestra, y de ser así, identificar qué tipo de cáncer afecta al paciente. Este paso es crucial para la determinación del pronóstico y elección del tratamiento. Entre las determinaciones que realiza el laboratorio de patología se encuentra la detección de marcadores moleculares, que son tests que buscan la presencia de algunos genes o proteínas alteradas en las células cancerosas, que participan en el mecanismo oncogénico”.

En los últimos años, se ha alcanzado un mayor entendimiento de los mecanismos que producen la enfermedad y también de sus bases genéticas y moleculares, lo que ha llevado a los profesionales a caracterizar mejor cada caso y así, personalizar el tratamiento de cada paciente. “Se trata de una enfermedad heterogénea, es decir que los enfermos pueden presentarse con diferencias en sus perfiles genéticos, en su presentación clínica y por lo tanto responder de manera diversa a los tratamientos disponibles” acotaron desde la entidad, en un informe enviado a El Observador, para el cual se contó con el asesoramiento de la Dra. Iris D. Boyeras Navarro (M.N 118839), especialista en neumonología del Instituto “Ángel Roffo”.

La mejor estrategia para disminuir la posibilidad de desarrollar cáncer de pulmón es dejar de fumar, sostienen desde la AAMR. “Aquellas personas mayores de 55 años, que tengan antecedentes de tabaquismo, están en mayor riesgo de sufrir cáncer de pulmón, por lo que se recomienda enfáticamente consultar a un especialista en neumonología para realizar chequeos anuales y contar con la oportunidad de una detección temprana”.