Dramáticos testimonios de damnificados por incendios en Corrientes: “Esto es como una guerra”

Desde mediados de enero, en la vecina provincia de Corrientes, pequeños, medianos y grandes productores forestales, ganaderos, yerbateros, arroceros, citrícolas, apicultores, entre otros, se vieron gravemente perjudicados por incendios, que arrasaron con casi 800.000 hectáreas, generando pérdidas por más de $ 26.000.000.000.

Pablo Sánchez, presidente de la Asociación de Sociedades Rurales de esa provincia, expresó que “es una catástrofe de la naturaleza, no sé si la gente alcanza a dimensionar lo que está pasando. Genera tristeza y desesperanza”, mientras que la productora Noelia Pietrantueno, en diálogo con Canal 6 ERTV, detalló cómo su empresa familiar se vio severamente afectada por el imparable avance de las llamas: “Mi padre tiene un campo en la zona de Mercedes, que se incendió el domingo 16 de enero. De 1.600 has, se quemaron 1.000. Y la semana pasada, ocurrió lo mismo con un campo arrendado en el Departamento Curuzú Cuatía, de más de 2.000 has. En este caso, el fuego cubrió en un 100% la superficie del mismo. Hay muchos productores y vecinos que perdieron todo. La lucha viene desde el 17 de enero, he salido en muchos medios, regionales, provinciales, nacionales, pidiendo por favor que se declare la emergencia, porque así, no podía actuar el gobierno nacional. Entre ellos (con las autoridades de esa provincia) se ‘tiran la pelota’. Lo que menos queremos es que nuestros políticos estén en la pelea, para ver quién saca mayor rédito de esto. Es muy triste levantarse a la mañana y ver tu campo negro, hecho ceniza, con vacas y caballos quemados. El dolor es muy grande, pero con la ayuda de Dios, saldremos adelante y es hora que el Estado esté presente, porque nos cobran fortunas en impuestos, que si no los pagás, te intiman, te buscan y es una vergüenza que uno tenga que salir a reclamar por los medios para que nos escuchen”.

– No se descarta que hayan sido intencionales…

– Llama mucho la atención lo que está pasando. Algunos argumentan que es por el calor, la sequía y los vidrios que están tirados. Y si bien la sequía es muy grande, tantos focos de incendios juntos, por los vidrios, no puede haber. Hay algo detrás, es lo que todos sospechamos. Hay comentarios de gente que vio parar a personas en moto y al rato, prenderse fuego el lugar… A esta altura, no sabemos ni qué pensar”.

H. VILLALVA: “NO SON CASUALES”

También con los medios del “Centro Periodístico de Entre Ríos” habló el productor Hugo Villalva, quien comentó: “Personas de avanzada edad no recuerdan haber vivido una sequía como esta y encima, con incendios, muchos de los cuales no son casuales sino causales. Con cualquier chispa, con la seca que hay, se arma un desastre terrible. Es muy triste ver la cantidad de hacienda y animales silvestres que se están quemando; mucha gente batallando para salvar su establecimiento, sus casas… Hay estancias que les entró el fuego y en menos de 2 horas les quemó todo… Culpan a los vidrios o latitas, pero en una forestación, con árboles de 15 metros de altura, ¿cuánto sol le va a llegar a una botella para prender fuego? No es por ese motivo. Mi producción está casi al límite con Brasil, los bomberos de ese país han venido a ayudar, porque ellos no tienen nada que hacer allá. Tienen la misma seca que nosotros, no hay diferencia de un lado al otro en ese sentido y acá nos estamos quemando. Algo raro hay… Los incendios son de tal magnitud, que una vez que se prende una forestación, no hay hombre ni vehículo para pararlo y devoran todo. La mayoría son eucaliptus, pinos y tienen tanta resina que cuando pasan los aviones hidrantes, cuando los mismos van a abastecerse y vuelven, está como que si no hubieran pasado antes. Mínimo están faltando unos 200 mm. de lluvia, el sol es tan fuerte que 20 mm es como un riego. Es lamentable ver la cantidad de animales quemados, que siguen viviendo igual. Es una cosa tremenda. Y lo que nos preguntamos es qué va a pasar con esos animales que sobrevivieron a la quemazón, que en sus campos no tienen alambrados, los que también fueron destruidos por el fuego. Van a salir a buscar agua, pasto y quedarán expuestos en las rutas. Y de los accidentes, ¿quiénes se van a hacer cargo? Hay una línea de energía eléctrica que va desde el puesto de Gendarmería de Cuay hasta Santo Tomé, que desapareció, se quemó todo, postes y cables. Esto es como una guerra. Hace falta de todo: agua, remedios, así que toda donación será bienvenida y muy agradecidos con tanta gente que está colaborando. La situación es desastrosa…