Diamante: Presente de la Escuela de Educación Integral Nº 15

En 1982 un grupo de padres, docentes y vecinos de Diamante, comenzaron las gestiones para la creación de una “escuela especial”, como se denominaban en esa época, porque había un espacio que funcionaba en la Escuela Nº 2 Alberti, pero se quería contar con una instalación propia.

Fue así que el 19 de febrero de 1985, a través de una resolución del Consejo General de Educación (CGE), se aprobó la propuesta con el nombre de “Escuela Especial de Características Múltiples” que incluyó la creación de cargos, que funcionaba en una casa donada de la calle 25 de Mayo (frente a la Dirección Departamental), la cual fue inaugurada oficialmente el 17 de agosto de 1985, con la presencia del gobernador Sergio Montiel. Los años siguientes se efectuaron las gestiones para contar con el predio propio y en 1990, a través del municipio, se hace la donación de un terreno por parte de una familia de la ciudad, para construir la estructura, cuya piedra fundamental se colocó el 19 de octubre de 1991. Mientras que en 1994 se hizo el acto inaugural del nuevo edificio ubicado en la calle Intendente Airaldi, que encabezó el presidente Carlos Saúl Menem, quien además obsequió un vehículo combi para la institución y fue en 1995 que dicho mandatario argentino, también habilitó el ciclo lectivo de ese año para todo el país, desde esta entidad.

Sobre la denominación, se presentaron ante el CGE varias propuestas y en la actualidad recibe el nombre de Escuela de Educación Integral Nº 15 “San Francisco Javier”.

A lo largo de estos más de 30 años, fueron parte de la institución diferentes grupos de trabajo que con esfuerzo y dedicación, fueron cumpliendo los objetivos que se proponían, mientras que hoy también existe un equipo comprometido de docentes, profesionales y colaboradores, que sigue adelante con la valiosa tarea de contener y asistir a los alumnos de la comunidad y la zona.

En el marco de este contexto sanitario, respetando los protocolos correspondientes, el establecimiento educativo abrió sus puertas y la directora María Inés Navarro, en diálogo con El Observador comentó que “la modalidad presencial se realiza de lunes a jueves y se decidió que el viernes se haga de manera virtual. Hoy contamos con 52 alumnos, cuando se pueda, algunos de ellos concurrirán a instituciones de la ciudad, los que tienen el apoyo de la maestra integradora. Nuestra propuesta educativa está dividida en grupos, tenemos el de Alfabetización; los Espacios Educativos Múltiples 1 y 2, donde en el primero están los chicos de 6 a 11 años, en el restante los adolescentes, en los cuales se trabaja más que nada en la autonomía de cada uno de ellos. También contamos con los Talleres Laborales, para los más grandes, que incluye cocina, panadería y uso de las TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), donde en este momento se trabaja en repostería, con una jornada a la mañana y otra a la tarde. En general tuvimos que dividir las actividades en dos turnos, porque los alumnos sólo pueden estar en la escuela 4 horas, lo que en la época normal, los horarios son diarios de 8.00 a 16.00. A esto se suman las propuestas de la huerta y vivero; las de música, educación física y arte; además, en nuestra institución se brinda el servicio y apoyo para chicos de otras escuelas que son ciegos o sordos. En el equipo interdisciplinario contamos con una psicopedagoga, una terapista ocupacional, 2 maestras integradoras, el referente técnico que se encarga junto al docente de organizar los talleres. Tenemos el grupo directivo, los docentes, el personal y 2 cocineras, porque por más que actualmente no funcione el comedor, donde normalmente brindamos el servicio de desayuno, almuerzo y merienda, hoy se entregan bolsones para las familias”.

– ¿Cómo se encuentra la infraestructura?

– Tenemos un buen edificio, con las distintas dependencias y el salón de usos múltiples, espacios verdes, por lo que se va haciendo el mantenimiento general de las instalaciones. Para ello, contamos con la ayuda permanente de la Cooperadora, que está conformada por padres y docentes, que a la mínima necesidad, reparación o refacción que planteamos, hacen lo imposible para buscar las soluciones, tanto en la parte edilicia, como institucional, por lo que es un grupo muy presente, al igual que el equipo que me acompaña en la escuela.

Además, los padres y los vecinos de la comunidad continuamente están colaborando con los eventos que vamos realizando durante el año, como así también recibimos la ayuda desde el municipio local, por ejemplo, para el corte de pasto en el predio.

Por lo que estamos sumamente agradecidos por el apoyo que venimos teniendo de los diferentes sectores de la sociedad, que incluye a las autoridades educativas y de supervisión, lo que nos permite continuar brindando el mejor servicio a nuestros queridos alumnos y cumplir con los proyectos que vamos planificando.