Daniel Celman y la pasión por el fútbol en el fin del mundo

Daniel Celman fue futbolista y tras su retiro estuvo muy vinculado a las divisiones formativas crespenses. Trabajó unos años en Cultural donde Fabián Demuth le brindó la posibilidad y luego pasó con su proyecto formador a Sarmiento de la mano del Oscar Pretz. Desarrolló su tarea con juveniles y acompañó a César Navoni incluso en los planteles superiores.

Actualmente se encuentra en Río Grande, Tierra del Fuego, allí donde parece que el mundo comienza a desaparecer, ciudad inmersa en un frío que para algunos resulta intolerable pero que igualmente sigue con su ritmo de vida.

“Vine por trabajo hace 4 años, en febrero del 2018, y me gustó. Me quedé y empecé a desarrollarme también en lo futbolístico, estoy dirigiendo en Petroquímico Chinese que juega la liga de AFA. Con el tema de la pandemia tuvimos un par de meses parados pero pudimos competir en la primera mitad del año y ahora nos preparamos para reiniciar y continuar con el segundo torneo”, manifestó en contacto con Canal 6 ERTV.

Sobre la actividad futbolística en aquella ciudad, contó: “Generalmente se juega fútbol de salón o 5. Hay una gran cantidad de torneos, es el deporte fuerte en la ciudad. Lo que respecta al fútbol 11, los tiempos para su práctica son más acotados por las inclemencias del clima. En verano tenemos ráfagas de viento de hasta 60km, son las 22.00 y tenemos el sol afuera; mientras que en invierno las sensaciones térmicas llegan a ser de 16 grados bajo cero entonces tenemos muy poco tiempo para desarrollar la actividad al aire libre”.

Río Grande también se caracteriza por ser receptor de visitantes provenientes de diversos terruños argentinos, quienes llegan con la intención de encontrar su lugar y logran ese objetivo: “En el equipo somos casi todos de afuera de la ciudad. Tenemos cuatro nacidos en Tierra del Fuego, luego son cordobeses, mendocinos, tucumanos, entrerrianos y demás. La gente viene por trabajo. El club se inició directamente desde una fábrica. Había jugadores que querían venir y si venías y empezaban a practicar, tenías tu trabajo asegurado. Hoy, como está la situación del país, gracias a Dios tenemos el 98% de la población con empleo”.

El que llega comienza a acostumbrarse al estilo y ritmo de vida: “En el invierno pasado tuvimos temperaturas de hasta 18° bajo cero, la vida se da de puertas adentro. Todo el mundo tiene uno o dos vehículos para trasladarse desde la casa al trabajo, desde la casa a hacer una actividad, lo que sea, se hace en vehículo. En estos momentos, no hay ninguna actividad a la intemperie. Está todo calefaccionado, con 23º en las viviendas o en los lugares de trabajo. En verano, en enero, tuvimos mucho calor, complicado, llegamos a 25º y tuvimos que suspender las actividades en la parte de administración, porque todas las instalaciones de instituciones son con ventanas cerradas sin aireación por el tema de la calefacción”.

EL RECUERDO: Celman dejó su sello en la faz formativa crespense. Tras estar algunos años en Cultural, pasó a Sarmiento para hacerse cargo de todas las divisiones junto a Alberto Farías. “La gente de Sarmiento siempre fue agradecida y yo con ellos por la oportunidad que me dieron. En la primera práctica que tuvimos con Juveniles, eran 13 chicos y arrancamos desde ahí a formar las tres categorías juveniles y las infantiles. Todos sabemos cómo está Sarmiento actualmente y en general los tres clubes de Crespo en divisiones menores. Se viene trabajando bien”, recordó.

Posteriormente estuvo en Concordia donde trabajó en Deportivo La Bianca, dirigiendo la Sub 14 y Sub 17 durante tres temporadas. Llegó a Río Grande y no estuvo alejado de la cancha: “Sin el fútbol no se puede, es parte de mi vida. Ahora estoy en un club relativamente nuevo, acá hay muchas industrias, empresas que se dedican a la parte petrolera y con un grupo de trabajadores dentro de una de esas empresas, surgió la idea de formar un club como Petroquímico. Desde el 2017 participan de la liga oficial de AFA de Tierra del Fuego”.