Cuarentena estricta en el AMBA: se extenderá desde el 1 al 17 de julio

Después de varios días de debate público y privado, el presidente Alberto Fernández, el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta y el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, acordaron ayer regresar a una cuarentena estricta en el Área Metropolitana, principal foco de los contagios de coronavirus.

Según adelantaron fuentes oficiales a LA NACION, la nueva etapa comenzará el 1° de julio y terminará el 17. En total, son 10 días hábiles, ya que hay dos fines de semana y dos días feriados. Se trata de una vuelta a la fase 1, aunque con algunas variantes: se mantienen la apertura de bancos y las salidas recreativas para los niños. En la Capital y el Gran Buenos Aires solo abrirán los comercios esenciales y no habrá salidas deportivas. Las industrias ubicadas en el conurbano también quedarían exceptuadas, ya que cumplen protocolos sanitarios y de transporte específicos.

El objetivo central de la decisión es bajar la circulación de gente, esencial para intentar disminuir el nivel de contagio. La clave, según coincidieron en el encuentro de ayer que duró casi tres horas, será el férreo control sobre el transporte público, aunque no adelantaron cómo y quiénes estará autorizados a utilizar trenes, colectivos y subterráneos.

Los tres mandatarios, que hoy harán el anuncio -en principio, al mediodía-, lo resolvieron en una reunión en la quinta presidencial de Olivos de que también participaron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli; los ministros de Salud Ginés González García, Fernán Quirós y Daniel Gollán; y la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzoti.

En principio, la intención que prevalecía este jueves en el Gobierno es que sea un anuncio grabado, sin conferencia de prensa. Kicillof y Rodríguez Larreta fueron citados a Olivos a las 11.30.

Ni bien se vieron, cerca de las 18, resolvieron suspender la presentación para hoy. Según confiaron testigos, antes de ingresar en la sala de reuniones, todo era “buena onda”. Todavía quedaba una larga jornada por delante para establecer los nuevos parámetros del aislamiento.

“Las tres jurisdicciones han acordado en avanzar en mayores restricciones a la movilidad que permitan una fuerte merma en la circulación. Tal como se viene expresando la decisión a la que se ha arribado tiene como fundamento la evolución de la situación epidemiológica en AMBA, tanto en la multiplicación de casos como en la contagiosidad del virus”, dijeron fuentes oficiales en un comunicado oficial.

Y agregaron: “Las características de la próxima fase requieren precisiones dada la delicada situación que estamos viviendo y las condiciones que impone la virulencia de la enfermedad. El Presidente, el gobernador y el jefe de gobierno están comprometidos en alcanzar las mejores soluciones entendiendo que la ciudadanía ha realizado un gran esfuerzo estos meses para lograr los objetivos. Necesitamos reforzar la responsabilidad que ha tenido la ciudadanía hasta el momento”.

Si bien Rodríguez Larreta no tenía intenciones de volver para atrás con comercios y las salidas a correr, lo cierto es que los últimos números de contagios -hoy, de los 2606 nuevos contagios, 2424 se concentran en los dos distritos (Buenos Aires, 1482, y ciudad de Buenos Aires, 942)-, pero sobre todo la ocupación de camas de cuidados intensivos (UTI) lo hizo cambiar de parecer. En el AMBA, la ocupación total de camas UTI escaló al 54,1%.

Convencido de la necesidad de “mostrar un acuerdo” con el Presidente y el gobernador, el jefe de gobierno porteño decidió ceder en su pretensión original. A cambio, solicitó un control más estricto en el transporte público interurbano, especialmente en el conurbano. Y a partir de los próximos días, se desplegará en toda la ciudad el plan detectar durante el tiempo que dure la nueva etapa. Rodríguez Larreta y su equipo tienen como objetivo volver a la etapa actual lo antes posible.

La medida implica un golpe fuerte para los comercios en la ciudad. En los que va de la pandemia, alrededor del 20% de los locales no pudieron sostener tantos días de inactividad y decidieron cerrar de manera definitiva; se trata de unos 20.000. Además, según el pronóstico de la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Fecoba), ese número podría elevarse al 27% con el nuevo endurecimiento del confinamiento.

“Sabemos que recibiremos quejas, pero después de esto vamos a salir fortalecidos y con una apertura mayor a la actual”, sostuvo un hombre de máxima confianza de Rodríguez Larreta.

Hoy, en tanto, el mensaje que dará el Presidente, junto a Kicillof y Rodríguez Larreta, estará centrado en “convencer” a los habitantes de la ciudad de Buenos Aires y del Gran Buenos Aires, donde se concentra el 90% de los contagios de coronavirus, de que es el “último esfuerzo” para aplanar la curva de contagios (Fuente: La Nación).

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la política de privacidad y los términos de servicio de Google.