En lo que va de la actual gestión municipal de Crespo, más de 400 vehículos han sido retenidos por distintas infracciones a las normativas vigentes, muchos de los cuales, aún no han sido retirados por sus dueños y posiblemente no lo hagan, si tenemos en cuenta los altos costos diarios que le genera al propietario en concepto de multa. Al respecto, el juez de Faltas de la municipalidad, Dr. Javier Méndez, explicó a FM Libertad 98.3 que “algunos ya resignan las motos porque las sanciones son importantes. Hoy el cannon por retención, tiene un valor de 10 litros de nafta por día, es decir, $ 130, que lógicamente se va sumando mientras pase el tiempo. Por otra parte, está el costo de entre 100 y 500 litros de nafta por la retención realizada, que serían unos $ 1.300 más, además de la multa por la infracción que le labraron. Si no tenía seguro, hablamos de un mínimo de $ 400 y un máximo de $ 1.500”.

– ¿Qué destino se le debería dar a esas motos que no son reclamadas y que se están acumulando en el corralón municipal?

– En su momento hubo un proyecto con el que yo no estaba de acuerdo, aunque lo respeto, que preveía el remate de los vehículos retenidos. Estuve en desacuerdo, porque esos rodados en general, no están en condiciones de circular y sería lanzarlos otra vez a la calle para devuelta perseguirlos o que nos generen problemas. Hoy se está evaluando otro sistema, que es el de la compactación, es decir, las motos que no son reclamadas por un largo plazo, que no tienen documentación y que no están en condiciones de andar por las calles, que sean destruidas, ya que no es justo que la municipalidad sea un depósito de cacharros por la negligencia de ciertas personas. Soy partidario a que se avance con esa iniciativa e incluso el producto económico de la compactación, se destinaría a entidades de bien público.

– ¿Cuáles son otras de las más comunes intervenciones para el Juzgado de Faltas?

– Las disputas entre vecinos por diferentes cuestiones en las que una parte se siente afectada. Un ejemplo, la plantación de árboles a distancias antirreglamentarias, es decir a menos de 3 metros de un tapial divisorio, que no se puede plantar porque a la larga, le provocará roturas en el tapial o le traerá otro problema… Hay intervenciones por casos de aguas servidas en la vía pública, por ruidos molestos, por la venta de alcohol a menores o fuera de horario…También por los trabajos de albañilería, que en invierno, por la tarde, se puede empezar a realizar a partir de las 14.00 y en verano a las 15.00. Hay que aclarar que si se constata que están trabajando fuera del horario, el responsable es el propietario de la obra, no el albañil.

– Hay personas que desconocen cada una de estas reglamentaciones…

– En Argentina y en cualquier país civilizado, la ley se presume conocida por todos. La ignorancia no es una excusa para violar el derecho. Lo mismo pasa con las ordenanzas, una vez que son publicadas… Por ejemplo, que pasaría si una persona mata a otra y dice: “yo no sabía que hay un Código Penal que me lo prohibía”. Desde que se publica la ley se la considera conocida y es bueno que la gente se preocupe por conocer las normativas. Desde el momento que convivimos en una comunidad organizada, tenemos que conocerlas, hacer el esfuerzo, averiguar…

– En una pegatina que hacían chicos con motivo de un cumpleaños de 15 de una joven, un vecino desde el techo, les realizó disparos con un rifle de aire comprimido, porque le molestaban los ruidos…

– Las pegatinas están prohibidas, que generalmente son llevadas a cabo por menores de edad. En ese caso, me parece que el medio empleado por este hombre para impedir la comisión de una falta, raya el delito, por lo que es más grave el remedio que la enfermedad. En la municipalidad, siempre hay una guardia, por lo que cuando la gente detecta una infracción a cualquier ordenanza vigente, debe avisar y el cuerpo de inspectores actuará.