CONSUDEC distinguió a la docente crespense Teresita de Berns

La docente crespense Teresita de Berns, fue distinguida días pasados con el premio “Divino Maestro” que otorga el Consejo Superior de Educación Católica de Argentina. El mismo, que se entrega desde 1977, es “en reconocimiento a la tarea de hombres y mujeres que, durante toda la vida, han dedicado sus esfuerzos a la educación como docentes y son reconocidos por generaciones de estudiantes como auténticos maestros”.

 

Este premio se originó en la inquietud de destacar a sacerdotes, religiosos y religiosas, laicos y laicas, quienes en sus Diócesis y provincias, “desarrollan o han desarrollado una labor apostólica-educativa en profundidad, viviendo su compromiso de fe en el mundo”.

 

Berns comentó que este año fueron 42 las personas premiadas de todo el país. “Hubo gente de Chubut, Río Gallegos, Santiago del Estero y de otras partes de Argentina. De Entre Ríos, fue la única” mencionó en diálogo con Canal 6 ERTV.

 

La docente expresó que “en los primeros 2 años, trabajé como maestra suplente en una escuela particular, no había privadas como ahora y posteriormente, me fui al campo a una ‘escuelita’ rural, cuyo edificio era asentado en barro, con techo de paja y que tenía 2 piecitas solamente. El piso era de tierra, por lo que había momentos, cuando los chicos movían mucho los pies, que se generaba una polvareda. Hoy uno lo cuenta y no lo pueden creer” recordó.

 

Después de estar 7 años en esa institución, “como me iba a casar, me vine a vivir a Crespo, donde durante 2 años trabajé en la Escuela N° 187, para luego pasar al colegio, que fue como volver a mi casa, donde hice la primaria y secundaria, desde los 9 hasta los 20 años. Empecé a esa edad, porque en la zona donde vivía, al sur del Palacio de Urquiza, no había posibilidades de ir a la escuela. Igualmente, yo tenía siempre por curiosidad querer saber leer y como mi abuela recibía una revista en alemán, empecé a hablar ese idioma. Cuando vine al colegio, aprendí rápido el castellano” rememoró en diálogo con este medio.

 

Finalmente agregó que “desde que me recibí hasta el día de la fecha, no salí de las escuelas y hoy, a los 78 años, sigo estando, en este caso como apoderada legal de la Escuela N° 70 San José”.