Condena para 4 sujetos que trasladaban más de 600 kilos de marihuana

El Tribunal Oral Federal de Paraná, encabezado por Roberto López Arango, Noemí Berros y Lilia Carnero, consideró como coautores a los cuatro imputados por Transporte de estupefacientes agravado por la participación de tres o más personas y los condenó a 6 y 8 años de prisión.

Cerró de esta forma una etapa en la investigación judicial por el mayor cargamento de marihuana descubierto en Paraná, el 26 de febrero de 2015. Esa madrugada, casi de casualidad, la Policía Federal dio con un camión cargado de ladrillos de droga, que estaba estacionado en el centro de la ciudad. Fue a raíz de un llamado anónimo que los agentes de la fuerza de seguridad corroboraron la existencia de un Mercedes Benz blanco, que permanecía estacionado y sin ocupantes sobre calle Urquiza casi llegando a Ramírez. Los policías montaron una vigilancia discreta y esperaron a que apareciera alguna persona que se hiciera cargo del vehículo. Pasadas las 8 de la mañana, cuatro personas a bordo de un Chevrolet Corsa blanco arribaron al lugar. Todos se bajaron del auto y cruzaron la calle. Uno de ellos llevaba una bolsa azul entre las manos. Dos subieron al camión y los otros dos volvieron al Corsa. En ese momento la Policía actuó. Redujo a los cuatro sujetos, los esposó y les cubrió el rosto. Mientras solicitaban las autorizaciones al Juzgado para requisar los vehículos, también pidieron la colaboración del can detector de narcóticos a la División de Toxicología de la Policía provincial.

Uno de los agentes intervinientes en el operativo, introdujo un destornillador entre las tablas que componían el doble fondo del camión, donde se podía observar la carga. Al extraer la herramienta, los testigos pudieron sentir el olor característico a la marihuana. Los policías observaron también que en la bolsa azul llevaban una balanza digital, dos llaves T, coincidentes con los tornillos que sujetaban el pido del camión.Luego llegó el perro adiestrado que se exaltó al recorrer la parte trasera del rodado. Tras esa señal y las autorizaciones judiciales necesarias, comenzó el desarme de la estructura armada con maderas tipo palets.

Los policías contabilizaron 937 ladrillos de distinto tamaño. En total, arrojaron un peso de más de 600 kilos de marihuana, lo que significó más de 4.275.000 dosis umbrales. “Con eso se podía intoxicar más de tres veces a toda la población de Entre Ríos“, sintetizo el fiscal Candioti en su alegato. La droga estaba acondicionada en ladrillos individuales envueltos en papel transparente, y otros paquetes de mayor tamaño, embalados en nylon negro y encintados. Toda la droga estaba escondida en un doble piso del camión, atornillado con tirafondos más nuevos que el resto del rodado. Al momento de la detención, además de las llaves T los policías secuestraron la balanza digital, dinero en efectivo y celulares, indicó La Voz.

El abogado defensor de uno de los acusados, Dr. Marcos Rodríguez Allende, defensor de Ramírez, pidió disculpas al resto de las defensas y deslizó acusaciones para con los otros imputados para defender al suyo. “El procedimiento de la Policía Federal, para esta defensa fue correcto”, asentó y de esa forma contradijo a Mario Franchi. “En lo que no coincido con la Fiscalía es en el rol que le da a Ramírez”, marcó y esbozó sus conclusiones: “El camión iba a Santa Fe, eso estaba organizado pero algo pasó y no pudo ser entregado en Santa Fe. Entonces volvieron a Paraná. Esa vuelta no fue organizada y regresaron perdidos. ¿Quién deja un camión cargado con 600 kilos de marihuana tirado en calle Urquiza? Esto es ilógico y no hablamos acá de ninguna logística. El monitoreo que se le endilga a Ramírez no es llegar en un auto al lugar”, sostuvo y también cuestionó las filmaciones de la Policía Federal. “Entiendo que el Ministerio Público Fiscal ha hecho un denodado esfuerzo por unir a los cuatro en este delito”, criticó y pidió la absolución por considerar que no había prueba en contra de su defendido.