Cómo prevenir la gastroenteritis e intoxicaciones. En Crespo hubo menos casos este verano

En verano, aumentan las consultas en clínicas, hospitales y demás centros de salud, por problemas gastrointestinales, tales como la gastroenteritis o las intoxicaciones. Es una época del año donde también se multiplican los riesgos, porque se come en sitios desconocidos, muchas veces sin las medidas correspondientes de seguridad. Profesionales consultados por El Observador aseguran que en estas primeras semanas del año hubo menos casos que la media histórica. Explicaron que la mayoría de los cuadros de gastroenteritis son de corta duración y sin necesidad de tratamiento, más allá de los cuidados especiales que se deben seguir.

El director del Hospital “San Francisco de Asís” de Crespo, Dr. César Muro, explicó que “haciendo una estimación, hubo un 30% menos de casos de gastroenteritis. Lo que sí vimos, es que durante el último año, tuvimos una permanencia de las enfermedades gastroentérmicas. En ese sentido, las cuatro estaciones han sido similares en cantidad” afirmó.

Los principales síntomas son diarrea acuosa, vómito, dolor de cabeza, fiebre, cólico abdominal, entre otros. Por ello el mayor riesgo para la salud de esta enfermedad es la deshidratación, sobre todo para bebés, niños pequeños, adultos mayores y personas inmunodeprimidas.

Se trata de la inflamación del tubo digestivo que sobreviene a una infección viral o bacteriana. La transmisión depende del tipo de virus o de bacteria, pero suele adquirirse por el consumo de agua o alimentos contaminados. También puede contagiarse de persona a persona, al entrar en contacto con las deposiciones y el vómito del enfermo.

En ese marco, desde el Ministerio de Salud de Entre Ríos se recordó que la prevención se basa en la instalación de medidas de higiene y cuidado personal, como lavado minucioso con agua y jabón de manos antes de manipular alimentos, después de alimentarse y luego de usar los sanitarios. Cada vez que se cambien pañales, se deben disponer los usados en recipientes con tapa, desinfectar el área de cambio de los mismos con lavandina diluida, lavar las manos del niño con agua y jabón y la de la persona que efectuó el procedimiento.

Por otra parte, se recomienda una correcta cocción y lavado adecuado de los alimentos; no cortar con el mismo cuchillo que se manipula carne cruda, otros alimentos como las verduras; consumir agua segura (puede lograrse a través de su cloración, con dos gotas de lavandina por cada litro de agua), hirviéndola entre 3 a 5 minutos o que la misma sea envasada. Asimismo, en caso de ser necesario, desde la mencionada cartera sanitaria se provee de pastillas potabilizadoras para garantizar este insumo esencial.

También se recomienda evitar bañarse en arroyos o lugares que no están habilitados para sumergirse, conservar los alimentos en la heladera y no tomar medicamentos sin indicación médica.

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