C. Avellaneda: La lluvia la dejó sin nada

Las últimas torrenciales lluvias inundaron la precaria vivienda de Nélida Acuña, una vecina de 73 años que vive en calle El Pinar. Fue tanto el daño que perdió todas sus pertenencias. “Se me mojó todo, quedé durmiendo en el barro. Perdí todo, no tengo ni colchones, no tengo dónde cocinar. El agua me llevó toda la mercadería, me mojó las mantas”, le dijo entre lágrimas a El Once.

Según su testimonio, el agua ingresó hasta cerca de un metro y medio de altura. “Pude haber muerto, tengo mi casa a medio construir y no tengo a donde ir”, señaló. Los habitantes de la zona atraviesan una situación similar. En ese sentido, la mujer aseguró que “nadie se acerca a saber si estamos muertos o vivos, nadie se preocupa por nosotros. Estamos todos en la misma situación, vivimos con lo poco que nos dan”.