Brasilera: Monge había advertido sobre la construcción del puente en el Aº Salto

El domingo último, las copiosas lluvias que anegaron varias zonas de Entre Ríos,  también provocaron el  desborde del arroyo del Salto que derivó en la interrupción del tránsito en la Ruta provincial Nº 11, por más de dos horas.

En abril de 2014 ocurrió lo mismo y a raíz  de ello, del diputado Jorge Monge (Cambiemos) presentó entonces  un pedido de informes y advirtió que la construcción del nuevo puente no permitiría el desagüe normal en casos de registrarse lluvias importantes, tales como las que caen ahora.

Con mediciones realizadas profesionalmente por el vecino de la zona Roberto Lell,  durante abril de 2014, en el pico de escurrimiento del agua caída en las intensas lluvias, el caudal fue aproximadamente de entre ochenta y cinco (85) y noventa (90) metros cúbicos  por segundo, mientras que la construcción del nueve puente permitiría evacuar solamente 60 metros cúbicos de agua por segundo. La construcción del puente es insuficiente para afrontar copiosas lluvias en la cuenca de este importante curso de agua que desemboca en el río Paraná por detrás de Aldea Brasilera.

“El desborde de las aguas del Arroyo del Salto a la altura del Kilómetro 19,5 de la Ruta Provincial N° 11, por sobre el nivel de la calzada en aquella ocasión se desplegó, es decir, pasó por encima de la misma,  en un frente de más de doscientos (200)  metros de longitud, debiéndose, en consecuencia, interrumpir por varias horas el paso vehicular. La altura de la escorrentía superó en aproximadamente cincuenta (50) centímetros en promedio   el nivel de la calzada de la mencionada ruta” se menciona en un comunicado enviado por el diputado.

El legislador radical preguntó entonces cuáles eran los estudios hidrológicos y  topométricos realizados para el dimensionamiento de la obra y  demás parámetros determinantes que dieron lugar al proyecto en ejecución y de futuras previsiones de obras a construir  como también preguntaba acerca de la construcción de puentes aliviadores en previsión de, al menos, las crecidas motivas por lluvias decádicas.

Hoy el fenómeno se reitera con lluvias mucho menores a las caídas en 2014.