Bovril: Veterinaria se refirió al grave problema de animales sueltos en la vía pública

Desde hace algún tiempo y tras la aparición de un video en una red social, en Bovril llamó la atención de la opinión pública por los graves problemas que se generan con los animales sueltos en las calles, en especial los perros. En diálogo con El Observador, la veterinaria Ivana Miller brindó algunos detalles de la problemática: “Pero hay demasiados animales en la calle. Algunos con dueño, la gran mayoría sin amo. Corren vehículos, generando problemas en el tránsito, también han mordido a transeúntes”.

Ante esta situación, habitantes de la ciudad, provenientes de diversas esferas sociales, decidieron buscar una solución. Así lo explica Miller: “Se armó un grupo para tratar de castrar los perros de la calle y de las personas de bajos recursos, que no tengan para pagar esta intervención, con el objetivo de que no siga creciendo esa población canina. No sólo castración de hembras sino también de machos, que logra bajarles bastante el nivel de agresividad. Esta decisión se tomó, porque hace bastante que la municipalidad no se hace cargo de nada. El intendente anterior, había hecho un quirófano para animales y quedó en la nada. Varios veterinarios, históricamente nos hemos ofrecido a colaborar y nunca se nos dio lugar. Aseguran que no tienen presupuesto, que no se puede. Llegaron a decirnos que si queríamos presentar un proyecto que lo hagamos, pero que en ese momento no había dinero disponible”.

En cuanto a las características que tiene el emprendimiento, la veterinaria manifestó: “El equipo que armamos no tiene banderas ni colores políticos. Hay personas relacionadas con algún partido, pero no representan a nadie ni hablan en nombre de nada. Somos simplemente ciudadanos tratando de colaborar con un problema real del pueblo. A la municipalidad se le ofreció participar del modo en que le parezca, pero sin sacar rédito político de la situación”.

Asimismo, comentó el modo en que se dividen las actividades: “El primer paso fue recolectar dinero para hacer las operaciones y para ello se formó una cuadrilla encargada de juntar los recursos. Otras personas hacen un recorrido barrio por barrio preguntando a los vecinos si quieren castrar sus animales y los veterinarios que formamos parte de la iniciativa, realizamos las castraciones por un precio menor a lo que saldría de forma particular. Otra de las tareas que realizamos es, cuando alguien deja tirado cachorritos, tratar de ubicarlos en diferentes familias. Lamentablemente, es una práctica muy común en esta ciudad. La gente no entiende el mal que le hace a estos animales y además todos los problemas que generan. Estamos intentando que la sociedad pueda comprenderlo”. Por último, dejó una reflexión: “Lo nuestro es sólo el comienzo. Faltan dar muchos pasos, en especial generar concientización. Esto se logra a través de charlas, por ejemplo, donde se pueda explicar al vecino cómo funciona la castración y porqué es beneficioso tanto para el dueño, como para el animal”.