Boca aplastó a River en el segundo superclásico del verano

superclasico-de-verano-2001498w943Los suplentes de Boca golearon a los titulares de River con un histórico 5-0 en el segundo Superclásico. Los goles del ganador los convirtieron Franco Cristaldo, Sebastián Palacios y Andrés Chávez, en el primer tiempo, y Jonathan Calleri y Rodrigo Bentancur, en el complemento. El conjunto que conduce Marcelo Gallardo sufrió las expulsiones del uruguayo Camilo Mayada (38’ PT), Carlos Sánchez (11’ ST) y Teófilo Gutiérrez (28’ ST). 
SE ESTUDIARON. El segundo Superclásico de 2015 tuvo un desarrollo entretenido y parejo hasta los 15 minutos iniciales y luego a un Boca contragolpeador y demoledor ante un River, endeble e irreconocible. 
En el cuarto de hora inicial los dos equipos tuvieron sus chances: Boca con un remate del chileno José Fuenzalida y un centro desde la derecha de Luciano Monzón, que resolvió muy bien Marcelo Barovero; y River con dos disparos de larga distancia de sus dos centrales Jonathan Maidana y Ramiro Funes Mori que encontraron estupendas respuestas de Guillermo Sara. 
APROVECHÓ LAS FALENCIAS. Pasado ese lapso, Boca explotó al máximo las facilidades que le ofreció el rival. Así un grosero error compartido entre Maidana y Funes Mori derivó en la apertura del marcador de Cristaldo, a los 15’. El volante, con un certero remate al ángulo derecho, le marcó su segundo gol al Millo en el verano. Enseguida llegó el segundo gol, con un contraataque perfecto, comandado por Chávez y definido con sutileza por Palacios, a los 22 minutos. 
River, en tanto, tuvo el descuento en los pies de Funes Mori, pero otra intervención estupenda de Sara evitó la caída de su arco, 180 segundos más tarde. 
Sobre los 30 minutos hubo devolución de gentileza: pase exquisito de Palacios y definición brillante de Chávez. El 3-0 sentenció el Superclásico y eso quedó aún más en evidencia, a los 38’ con la ingenua expulsión del uruguayo Mayada. 
Esa media hora de juego fue una serie de contrastes: River hizo todo mal, porque falló en todos los aspectos del juego, y Boca, sin hacer todo bien, lo vapuleó con una formula vieja, pero simple: contragolpear. 
ESTUVO DE MÁS. Gallardo, con un 0-3 y con 10 jugadores, realizó tres cambios antes del inicio del segundo tiempo: Carlos Sánchez por Mora, Germán Pezzella por Maidana y Eder Álvarez Balanta por Vangioni, para intentar nivelar el desarrollo del juego.Es que la defensa fue un espanto, pero el trabajo de los volantes Ariel Rojas, Matías Kranevitter y Mayada fue aún peor y el tridente ofensivo, Leonardo Pisculichi; Rodrigo Mora y Teófilo Gutiérrez, no aportó nada. 
Sin embargo, el panorama se oscureció todavía más cuando, a los 11’ Sánchez se fue expulsado. 
Pero Boca, con la ventaja en el marcador y numérica, se relajó y se dedicó a manejar la pelota, casi sin pisar el área rival, en los primeros 15 minutos. Es que 60 segundos más tarde lo tuvo Pablo Pérez, pero salvó Barovero. Todo esto a partir de la conducción de Fernando Gago, que hizo expulsar a Teo Gutiérrez, pero con el apoyo de un extraordinario juego colectivo. 
Boca, con los goles de Calleri (36’) y Bentancur (39’), terminó de decorar el resultado. Lamentablemente incidentes menores en las tribunas opacaron una verdadera fiesta boquense en Mendoza.