Antes del comienzo de la temporada de invierno se sabía que la inflación golpearía las tarifas de los distintos centros de esquí del país. Los incrementos, explicaron, se deben a una suba en los costos de mano de obra y combustible. En la mayoría de los casos aplicaron aumentos de entre 30% y 35% en los pases diarios.

Para los esquiadores en el cerro Catedral, los precios pasaron de $455 a $585 en un año, un aumento de 28,5 por ciento. Pero los incrementos no paran ahí. A partir de este año, acercarse a la nieve y poder jugar con ella, sin esquiar, comenzó a ser una actividad que se cobra. Desde el 12 de julio, para tocar la nieve en el Catedral se abona la tarifa de Alta Temporada: $ 425 los adultos, $ 350 los menores y $ 245 los infantes. Esto supone una suba del 20%.

Desde el cerro sostienen en que cumplen con las condiciones establecidas por la concesión que dura hasta el 2025 y que se paga al Municipio de Bariloche alrededor de 6 millones de pesos anuales. Según el acuerdo, la empresa que administra el cerro puede tarifar las zonas donde haya realizado inversiones. El año pasado se instalaron 10 cañones de nieve en el sector llamado Play Park que alcanza la falda del cerro. La inversión fue de más de un millón de dólares, lo que habilitó a cobrar la tarifa, incluso aplicada a los bebés.

“Hay una responsabilidad del Estado que no da opciones, no crea espacios más económicos. Hoy una familia que se toma el colectivo urbano y llega de la mano con sus hijos, ¿qué hace? Nada, ni el chocolate puede tomar. Podrá ir a la Plaza Catalina Reina un rato porque es gratis y volverse”, le dijo a Clarín, el Presidente del Concejo Deliberante, Ramón Chiocconi (FpV).

Por su parte, la ministra de Turismo de Río Negro, Mariana Giachino justificó los aumentos: “Hay una concepción errada de las licitaciones por parte de la gente, el Catedral realizó importantes inversiones y ahora se puede disfrutar de una estructura que antes no estaba. Gracias a los cañones hay nieve todo el invierno en la base y la gente puede ingresar pagando la mitad que un pase de esquí”, le explicó al matutino.

El único terreno libre y gratuito para los visitantes por ahora es la Plaza Catalina Reinal que tiene 500 metros cuadrados. Un espacio insuficiente en invierno cuando arriban al centro invernal 10 mil personas por día.