Aseguran que el 20% de los jóvenes sufre cuadros de depresión. Profesional crespense aconseja a los padres qué hacer

Estudios a nivel mundial revelan que 1 de cada 5 adolescentes sufre un cuadro de depresión. La presión por sus expectativas académicas, cuestiones sentimentales o los cambios en sus cuerpos, pueden ocasionar altibajos y trastornos, que en algunos casos, dejan de ser temporales.

La Lic. Luciana Pach expresó que “la adolescencia es una etapa de construcción y en ese sentido, hasta la adultez, pueden aparecer ciertas crisis, muchas veces asociadas a la inestabilidad emocional. Puede ser que tenga hoy un buen día y al siguiente, uno malo, que esté apático o retraído. Se siente solo, poco acompañado o querido, es como que no tiene un lugar en el mundo. Normalmente hay que prestar atención a la característica e intensidad de ese tipo de trastornos”.

La profesional crespense agregó que “muchas veces, los adolescentes no tienen los recursos para enfrentar la situación que viven y sumado a eso, están muy compenetrados en las redes, ya sea el whats app, el celular o la computadora. Entonces, es como que tienen amigos en todos lados, pero en la realidad, ¿cuántos amigos son de verdad…? Es como que les cuesta llegar a una conexión real, entre ellos y eso pasa también con sus padres. Lo que uno tiene que estar observando, es qué apertura tenemos para el diálogo. Hay que dejarlos expresarse, porque muchas veces los mayores somos los que cerramos un poco esa permeabilidad que deberíamos tener, para que nos cuenten cosas y así buscar las soluciones” expresó en diálogo con Canal 6 ERTV. Aconsejó que “hay que dejarlos que tomen sus propias decisiones, pero a su vez, hay que orientarlos, desde la comprensión y el amor”.

– Muchos buscan “falsas soluciones”, en la droga, el alcohol…

– Sí, creen que ahí está la solución y tenemos otro problema después. La adicción los hace entrar a determinados grupos que antes no existían para ellos y eso genera que entren a mentir, a querer cubrirse y una cosa lleva a la otra y así, surgen problemas más graves y difíciles de solucionar.

– ¿Qué le diría a los padres que ven esa situación en sus hijos?

– Que hagan una consulta, eso no significa tener que hacer un tratamiento de años. Al consultorio llegan por situaciones que los angustian mucho, pero tal vez ese no es el conflicto de base. Al conflicto hay que trabajarlo un poco para descubrirlo, pero igualmente está asociado con esto de la falta de contención y de sentirse solos.