Pese a los daños que ocasionó el pasado sábado el fuerte temporal de lluvia y viento en las instalaciones de la Cooperativa Agrícola, Ganadera y de Servicios Públicos Aranguren Limitada (COOPAR), donde se voló el techo de la planta de uno de los silos, hubo roturas de estructuras, se derrumbó la antena de comunicaciones y levantó cartelería, “no se verá afectado el normal funcionamiento de la entidad”, afirmó el contador de la entidad Marcelo Pagliaruzza.

El profesional explicó que la tormenta se inició el sábado con “lluvia y fuertes vientos a las 22.15 y duró aproximadamente una hora”, señalando que en la Cooperativa “voló el techo de la planta de silos número seis, ocasionó daños en las plantas dos, cinco, siete y ocho, destruyó la noria de la siete, la más nueva ubicada a la entrada de la localidad, provocó la caída de la antena ubicada frente de las oficinas y produjo otros daños menores, como por ejemplo, roturas de portones tinglados de descarga y voladura de la cartelería”.

Asimismo aclaró que los daños no afectarán la atención al público, destacó que la comunicación interna sí tendrá algunos inconvenientes, ya que hay antenas de distintos enlaces que afectan la parte comunicacional entre diferentes áreas de la empresa.

“En rigor, la tormenta del sábado no fue como la del 26 de enero de 1998, cuando un tornado desató su furia en la región, tronchando en minutos lo que costó años de lucha y sacrificios” mencionaron desde la entidad agregando que “entonces, la fuerza del viento destruyó todas las instalaciones de silos y galpones en la Cooperativa de Aranguren; únicamente quedó operable una planta de silos de 2.000 toneladas. No obstante, los cooperadores templados en circunstancias adversas no se amilanaron y pasado el meteoro comenzó la reconstrucción. Inmediatamente se contrataron varias empresas (una por planta), y al 30 de mayo de ese mismo año estaba todo en funcionamiento y con mejoras incluidas”.