10 de diciembre: Día del Trabajador Social

La celebración por el Día del Trabajador Social se celebra cada 10 de diciembre, en coincidencia con la conmemoración de los Derechos Humanos.

La decisión se tomó el 14 de abril,  tras la primera reunión de la junta de Gobierno de la Federación Argentina de Asociaciones Profesionales de Servicio Social (Faapss). Así se modificó la fecha del 2 de julio “que tenía un origen religioso”, según expresa la Resolución  JG 1/12 que regula la decisión.

El encuentro tuvo lugar en el salón Argentina del Paraná Hotel Plaza Jardín, en 9 de Julio 60 de la capital entrerriana y en este marco, los representantes de los colegios y consejos profesionales de las diferentes provincias de toda la Argentina abordaron  diversos temas inherentes al colectivo profesional.

La reunión contó con la adhesión de diferentes áreas y la apertura del encuentro estuvo a cargo del  subsecretario de Derechos Humanos, Julián Froidevaux,  quien dio la bienvenida a los representantes de los colegios de diferentes provincias.

En ese sentido, uno de los temas centrales de abordaje del encuentro fue la modificación del día del Trabajador Social, con la propuesta de pasarlo del 2 de julio al 10 de diciembre, “como una postura política desde nuestro colegio”, según expresó la presidenta del Colegio de Asistentes Sociales de Entre Ríos, Valeria Irina Moreyra.

Así, en un cambio histórico para la profesión se decidió hacer lugar a la propuesta que tiene como marco a la Resolución  JG 1/12 en donde se afirma que el 2 de julio “tenía un origen religioso, ya que fue la asistente social Marta Ezcurra quien propuso la misma en 1961 coincidiendo con la liturgia católica de entonces que ese día celebraba el día de la Visitación de la Virgen María a su prima Santa Isabel y esto tenía que ver también con el hecho de que Marta Ezcurra era miembro de la Unión Católica Internacional de Servicio Social”.

Además, el documento especifica que “existieron varias propuestas de modificación de esta fecha, por considerar que no representaba al conjunto de trabajadores sociales del país, sino sólo a los que eran católicos y por lo tanto era una fecha sesgada y discriminatoria”.